Situación muy delicada la que atraviesa el FC Barcelona. Mientras desde la junta directiva se procura vender cierto optimismo, desde la Liga se transmite un panorama del todo pesimista. Para la inscripción del fichaje de Vitor Roque en el mercado de invierno será imprescindible la salida de otro futbolista de la plantilla. En caso contrario, no llegará en enero y su contratación se verá abocada al próximo mercado de verano.
Según ha podido saber Culemanía, el Barça cuadró los números por los pelos el último día del mercado de fichajes gracias a la venta de Abde al Betis. Esta operación era necesaria para inscribir a Joao Félix y Cancelo, que entraron con calzador, pero en ningún caso puede servir para ayudar a la inscripción de Vitor Roque.
Por lo tanto, según ha transmitido la Liga, la única manera de inscribir el fichaje del delantero brasileño pasa por la salida de otro futbolista de la plantilla. La única alternativa que se vislumbra sería una hipotética rebaja de salario de Frenkie de Jong que permita la inscripción de O Tigrinho.
Según las normas del control económico del organismo que preside Javier Tebas, la fórmula pasa por aplicar la norma del 50%, ya que el Barça está excedido en el límite salarial. Esto significa que debe salir un jugador en enero y Vitor Roque podrá cobrar la mitad de la ficha del que salga. Al menos, esa es la teoría. En caso de que Frenkie se rebajase la ficha, el todavía jugador del Athletico Paranaense cobraría la mitad de lo que liberase el medio holandés.
230 millones de exceso salarial
Hay que recordar que la plantilla actual del Barça consta de tan solo 19 fichas del primer equipo. El aspecto positivo es que ello obliga a Xavi a dar más oportunidades a jóvenes de la cantera como Lamine Yamal o Fermín López.
El Barça actualmente destina 404,7 millones a la masa salarial del primer equipo. A esa cifra hay que sumar otros 92 millones de fútbol formativo, femenino y secciones, lo que dispara el coste total deportivo a unos 500 millones de euros. La Liga, por su parte, exige al Barça un gasto salarial de 270 millones en total. Y subió durante el verano, ya que en un principio el límite era de 215 kilos. Esto significa que el club destina a fichas deportivas prácticamente el doble de lo que le permiten, a pesar de haber conseguido reducir 160 millones en salarios del primer equipo.
El contraste entre el mensaje que envía el Barça y el de la Liga es total. El presidente Laporta transmite a su entorno que están en el camino para poder inscribir al crack brasileño. El objetivo es generar nuevos ingresos y, sobre todo, asegurar unos beneficios ordinarios cuando termine la temporada. Las previsiones actuales apuntan a 11 millones de beneficios antes de impuestos y sin utilizar nuevas palancas.
Cobros pendientes
Un escenario idílico que cuenta con la llegada del capital prometido tras la venta del 29,5% de Barça Studios por parte de Orpheus Media y Socios --que solamente conservan el 19,5% del 49% que compraron hace un año-- a los fondos Libero y Nipa Capital. El problema es que desde el club todavía no se ha explicado cuánto dinero se ha cobrado y cuánto falta por ingresar.
El año pasado, Socios y Orpheus compraron el 49% de Barça Studios a cambio de 200 millones de euros. Únicamente abonaron un pago de 20 millones --10 cada uno-- el pasado diciembre de 2022. Este verano, todavía sin abonar los 180 restantes --90 por compañía-- se ejecutó una venta del 29,5% a Libero y Nipa Capital. Estos fondos acordaron inyectar 120 millones --60 cada uno-- al club, pero únicamente han adelantado 20 millones (que se sepa).
Si se resuelve esta situación de impagos, adeudos y aplazamientos, el Barça podría entrar en un escenario más halagüeño para facilitar la incorporación de Vitor Roque en enero. Sin embargo, y siempre según la normativa que emana de la Liga, su llegada no será posible mientras no salga otro futbolista en el mercado de invierno.