Como si fuera un gol. Mounir Nasraoui, Hustle Hard por su usuario en Instagram, red en la que tiene más de 820.000 seguidores, es el fan número uno de su hijo, Lamine Yamal. No hay ningún tipo de duda. Celebra todos los éxitos del joven extremo del FC Barcelona como si fueran suyos. El sueño de su hijo también el de Mounir.
Su último 'gol' fue abriendo cromos. Es habitual ver al padre de Lamine haciendo directos en Instagram con sus amigos, en los que comparte algunos momentos de su vida. Hace un par de semanas, le dio por hacer recetas de comida. La última, por abrir cromos. Su objetivo, sacar a Lamine Yamal en un sobre.
Más de 6.000 personas vieron como, repetidamente, Mounir iba gastando sobre y Lamine no iba saliendo en ninguno. Hasta que llegó la traca final. En un mismo paquete tocaron Pau Cubarsí, amigo y compañero inseparable de su hijo, y Lamine Yamal. Su padre y su amigo saltaron de alegría, como si fuera un gol.
Fan número 1
"Cómo no estés en casa...", bromeaba Mounir antes de que le saliera, como un padre cuando tira de las orejas a su hijo. "¡Lamine Yamal, para bien o para mal!" gritó de alegría luego. Acabó chocándole la mano a sus amigos y proclamándose el "mejor padre del mundo".
Mounir es un tipo alegre. Entusiasmado. Por fin vive una vida en paz después de haberlo pasado mal en el pasado. El nombre de su hijo, de hecho, ya explica una pequeña historia de superación. Lamine y Yamal eran dos amigos que acogieron a Mounir. Así es cómo sale el nombre de la nueva estrella mundial, que juega en el Barça.
El padre de Lamine Yamal no tiene miedo a mostrar su personalidad en público. Quiere a su hijo y le acompaña allá dónde va. El extremo azulgrana tiene tres pilares en su vida, tal y como dijo en su discurso al recoger el Kopa, su abuela, su madre y su padre.