Allá donde va Lamine Yamal, va su padre, Mounir Nasraoui. El lunes pasado, en la gala del Balón de Oro, no fue diferente. Su hijo, crack del FC Barcelona, alzó el Trofeo Kopa, que reconoce al mejor futbolista joven del planeta. Y Mounir desprendía felicidad y la ilusión de un niño. Disfrutó en París como pocos y compartió su alegría a través de Instagram.
Mounir se fotografió con todo lo que se movía. Desde que salió por la puerta de su casa en Barcelona hasta que terminó la gala en el país galo. Joan Laporta, Rafa Yuste, Xavi Puig, Pau Cubarsí y su padre, Dani Olmo, Jorge Mendes... Más de una decena de fotos subida a redes en tan solo una tarde. Es un padre orgulloso de lo que está logrando su hijo.
El padre de Lamine Yamal es una persona humilde y familiar. Pero también extrovertida. Más que su hijo. De hecho, dejó uno de los momentos de la gala, cuando los presentadores le preguntaron al extremo del Barça si pensaba en conseguir más hitos en el futuro. Lamine, con problemas con el traductor, se quedó callado. Respondió Mounir, con un "¡yeah!" que sonó de fondo.
Corazón culé
Contento y feliz es cómo están los padres de Lamine Yamal. "Somos los padres más orgullosos del universo", aseguró en un post junto a Sheila Ebana, madre del futbolista. Asimismo, a pesar de haber tirado hacía el Real Madrid en el pasado, mostró su pasión por los colores del Barça y la Masía. Toda publicación en Instagram iba acompañada con un corazón azul y otro grana.
Mounir Nasraoui vive en un sueño. El sueño de todo padre, el de ver cumplir a su hijo todas sus metas. No será la primera vez que acuda a una gala del Balón de Oro. La próxima, probablemente, será con Lamine Yamal recogiendo el premio gordo.