¿Quién es Slavko Vincic?

Slavko Vincic (25 de noviembre de 1979, Maribor) es el árbitro designado por la UEFA para dirigir el próximo FC Barcelona-Bayern de Múnich de la Champions League. Este colegiado, oriundo de Eslovenia, es internacional desde 2010. El organismo rector del fútbol europeo lo mantiene en gran consideración, con finales como la de Europa League de 2021 y la de Champions de 2024 en su historial. No obstante, el trencilla esloveno también guarda un pasado oscuro dentro y fuera de los terrenos de juego. 

En can Barça, Vincic evoca las mayores pesadillas de los culés. El próximo árbitro que se cruzará el conjunto azulgrana ya ejerció de colegiado principal en la derrota frente al Inter de Milán (1-0) en la edición 2022-23. Un tropiezo marcado por la polémica --penalti no señalado y gol anulado-- y que costó la temprana eliminación barcelonista en la fase de grupos. Y todavía hay más. El trencilla mariborense vivió el episodio más oscuro en 2020 con su detención durante una redada contra una red de prostitución y tráfico de drogas y armas.

El escándalo de Milán

Vayamos por partes. Primero, en lo que afecta al Barça, Slavko Vincic amargó a millones de culés en el estadio Giuseppe Meazza el 4 de octubre de 2022. Los pupilos de Simone Inzaghi se impusieron por la mínima gracias a un gol de Hakan Calhanoglu al filo del descanso. No obstante, un gol anulado a Pedri y un penalti no indicado por mano dentro del área pudieron haber cambiado el devenir del encuentro y, en consecuencia, de la competición.

En el minuto 67, Pedri anotó el tanto que habría significado el empate. Sin embargo, Pol Van Boekel, árbitro designado en el VAR, decidió invalidar el tanto, puesto que el balón rozó la mano de Ansu Fati antes de entrar en portería. El delantero no podía retirar la mano y el contacto ni siquiera modificó la trayectoria del esférico.

El penalti de Dumfries

Ya en los últimos 10 minutos, esta vez sí, Vincic se erigió en protagonista --más bien antagonista-- del partido del cuadro catalán. Denzel Dumfries despejó con la mano extendida un centro que se dirigía a la cabeza de Ansu. Penalti como una plaza de toros, obviado por el VAR, a la par que los colegiados de campo.

La parroquia azulgrana no podía dar crédito y Xavi Hernández estalló enfurecido en sala de prensa: "Sentimos que ha sido una injusticia grande. No puedo esconderme, estoy indignado. El árbitro debería dar explicaciones, salir a hablar. Se va y no pasa nada. Que salga aquí y dé explicaciones porque no entendemos. La palabra es indignación".

Detenido en 2020

Lejos del campo de fútbol, Slavko Vincic se vio envuelto en una batida durante su estancia en una cabaña de Bijeljina, Bosnia y Herzegovina, en 2020. Los registros se llevaron a cabo en la investigación de una red de prostitución y tráfico de drogas y armas. Las fuerzas policiales encontraron 14 paquetes de cocaína, 10 armas de fuego, 3 chalecos antibalas y más de 10.000 euros en efectivo durante la operación.

El operativo culminó con la detención del árbitro, que había acudido a comer con Tijana Maksimovic, el presunto capo de la red. Vincic rechazó cualquier vinculación con la mafia y aseguró que desconocía las actividades que se realizaban en dicho edificio: "No tengo nada que ver con eso. Acepté una invitación para almorzar, que resultó ser mi mayor error. Me arrepiento de ello. Estaba sentado en una mesa con mi compañía, de repente vino la Policía y sucedió lo que sucedió".