Messi, Luis Suárez y Jordi Alba ya protagonizan tanganas en Miami

El enclave del Barça en la MLS ha protagonizado su primer lío en Estados Unidos. La ida de la Copa de Campeones CONCACAF entre el Inter Miami y Rayados de Monterrey (1-2) terminó en tangana en los vestuarios. Leo Messi, Luis Suárez, Jordi Alba y Tata Martino se enzarzaron en los vestuarios con el entrenador del equipo mexicano, Tano Ortiz, y el técnico asistente, Nico Sánchez. No han trascendido imágenes de la riña posterior al partido. Los hechos se han conocido mediante el periodista Fernando Schwartz.

El árbitro guatemalteco Walter López expulsó a David Ruiz tras mostrarle la segunda cartulina amarilla en el minuto 65. El centrocampista le dio un manotazo a Maxi Meza. Aun así, el castigo caldeó los ánimos entre los jugadores de la franquicia de Florida. Incluido el propio Leo Messi, que presenció la eliminatoria desde el palco del Chase Stadium.

Lío en los vestuarios

"Donde estuvo caliente fue al término del partido. Tata Martino se fue directamente a reclamarle al árbitro lo que no le gustó en el terreno de juego. Se unieron Leo Messi, Jordi Alba y Luis Suárez, que estaba fuera de sí. De ahí se toparon con el cuerpo técnico de Monterrey. Quisieron encararse con el Tano Ortiz por lo que había declarado de que el arbitraje pudiera favorecer a la MLS. Intervino la directiva de Rayados para separar y pidieron a los comisarios de CONCACAF que hagan un reporte muy completo", relató el periodista Fernando Schwartz en Fox Sports.

Declaraciones incendiarias

El míster del conjunto mexicano, Tano Ortiz, caldeó el ambiente en la previa del encuentro: "Espero que nuestros jugadores entiendan que Messi es un jugador más, porque después viene lo otro: el árbitro, el marco, la gente, Lionel que quizá hoy está más pendiente de lo que sucede y no juega tanto. Todo lo que rodea a Messi, puede llegar a tener decisiones deportivas y extradeportivas, ¿Fui claro?".

El exfutbolista argentino, al mando de Rayados, compartió su preocupación con la actuación arbitral antes de que tuviera lugar el partido de ida: "Es obvio me preocupa el entorno. No sé si pueda llegar a perjudicar a Monterrey como tal, pero el negocio va a estar ahí. Sabemos que el negocio no va por el lado de Monterrey, eso lo sabemos todos, yo no estoy diciendo algo que no sepamos todos. ¿Lo comparto? ¿No?".