El PSG de Kylian Mbappé y Ousmane Dembelé se impone a la Real Sociedad. Las individualidades poderosas a las órdenes de Luis Enrique han resultado demasiado exigentes para el cuadro de Imanol Alguacil. Los frentes se le han acumulado al conjunto donostiarra por ambas bandas, hasta que el desequilibrio francés ha desnivelado la balanza. Mbappé y Bradley Barcola, representado por Jorge Mendes, han encarrilado la eliminatoria tras el descanso en el Parque de los Príncipes.
Y eso que André Silva ha protagonizado una carta de presentación difícil de mejorar mediante un tiro que ha lamido el palo en el primer minuto. Mbappé ha contribuido a un comienzo frenético con un primer tiro detenido por Álex Remiro. La presión adelantada del conjunto vasco dejaba excesivos espacios a las espaldas de los atacantes visitantes.
El ariete portugués realista ha vuelto a rozar el abrelatas en un cabezazo que se ha marchado a escasos centímetros de la escuadra. Por momentos, la estrategia asfixiante de Alguacil surtía efecto. También Javi Galán ha logrado parcialmente frenar las embestidas de Dembelé. En el otro costado del campo, Take Kubo y Lucas Beraldo han protagonizado otro duelo feroz en el uno contra uno.
Mbappé, imparable
La Real ha aguantado de pie 45 minutos. Un latigazo de Mikel Merino al larguero ha señalado el camino a los vestuarios con unas tablas más que meritorias. Con esto, el Paris Saint Germain no necesita más que una sola ocasión para fulminar a su rival. El cuadro entrenado por Luis Enrique rebosa polvóra en ambos carriles.
Y a un astro de talla mundial como Mbappé no se le puede perder la pista ni un segundo. Porque le ha bastado con irrumpir en el segundo palo y rematar un cabezazo de Marquinhos para romper el empate en el minuto 58 (1-0). De ahí en adelante, el tridente atacante parisino se ha convertido en martirio donostiarra.
Barcola se estrena
Dembelé ha castigado a Galán con repetidas internadas y caracoleos. Un cambio de piernas en campo propio ha iniciado el contraataque del segundo tanto. De un lado a otro, el balón ha terminado en el extremo opuesto. Barcola ha recibido en la izquierda, se ha deshecho de Hamari Traoré y ha culminado su cabalgada batiendo por bajo a Remiro (2-0). Se trata de su primer gol en la Champions con 21 años. La voluntariosa Real ya no ha levantado la cabeza, exhausta después de una contienda de tantas idas y vueltas.