María Patiño enumera las mentiras de Rocío Carrasco: "Ha perdido la noción"

En el segundo y tercer episodio de Rocío, contar la verdad para seguir viva, Rocío Carrasco empezó a soltar las primeras acusaciones públicas. Mientras la hija de Rocío Jurado daba nuevos detalles de su relación y de los maltratos por parte de Antonio David Flores, llegaron los primeros nombres conocidos, a los que reprochó su actitud.

Uno de ellos fue el de la periodista María Patiño, a quien acusó de conocer las infidelidades de su exmarido con una mujer llamada Sonsoles. Unos cuernos que tuvieron lugar cuando ella estaba embarazada de su hijo menor, David Flores Carrasco: "Lo sabía todo el pueblo, menos yo, hasta que lo vi".

La primera señalada: María Patiño

Según el testimonio de Rociíto, la gente que pasaba por la calle le gritaba que era una "cierva embarazada", y acusó a la periodista de saberlo todo y callarlo. Pero María Patiño salió a defenderse de esas afirmaciones a través de su cuenta de Twitter, donde aseguró que "Rocío vive y recrea una verdad, pero no como fue".

La presentadora de Socialité reconoció vivirlo, pero matizó cómo fue: "Maté por demostrar la verdad, logré probarlo. Pasaron los años y pocos nos creyeron. Rocío no recuerda cómo ocurrió todo. Falso lo que cuenta. Mi verdad real no coincide con su vivencia". Unas palabras que fueron muy criticadas por los defensores de Rocío Carrasco en redes sociales, por lo que decidió entrar a Sálvame vía telefónica para enumerar las mentiras de Rociíto. Eso sí, con una puntualización inicial: "Tengo que decir que, por encima de todo, aunque está equivocada, no rompe para nada la historia".

Las mentiras de Rocío Carrasco

Rocío Carrasco dijo que pilló a Antonio David Flores besándose con Sonsoles tras la barra de un bar, pero María Patiño aseguró que eso era mentira: "Jamás les vio besándose, ella lo sospechaba. Lo descubrió por el teléfono, por las facturas. Creo que Rocío, con el paso del tiempo, ha perdido la noción de cómo ocurrieron determinadas cosas", señaló la periodista. Eso sí, también puntualizó que eso no significa que su exmarido no le fuera infiel: "Me parece genial que se vea lo que se está viendo de Antonio David, porque esa es la realidad". 

Sin embargo, dejó claro que no hubo “silencio cómplice” por su parte porque se enteró de todo eso en el año 2000: "Mi única obsesión era contar la verdad. Me partí la cara". Es más, recordó que Rocío Carrasco se sentó con ella y le dio las gracias en su momento. Y en este sentido, defendió a Chayo Mohedano, la prima de Rociíto, que también fue acusada de cómplice por la hija de Rocío Jurado: "Fue Chayo quien le dio el número de Sonsoles para que pudiera comprobar la factura telefónica".