El presentador Jorge Javier Vázquez / MEDIASET

El presentador Jorge Javier Vázquez / MEDIASET

Famosos

Así ha sido el solitario Fin de Año de Jorge Javier Vázquez

El rey de la telebasura pasa una Nochevieja entre recuerdos, melancolía... y la visita de su expareja

5 enero, 2021 10:34

El Fin de Año de 2020 ha sido de los más especiales de las últimas décadas. El Covid ha limitado las reuniones a 10 personas -pese a las fiestas ilegales- y decretado un toque de queda a la 1.30 horas.

Los famosos, a excepción de Leticia Sabater, han respectado la normativa y gente como Jorge Javier Vázquez ha pasado una Nochevieja de lo más solitaria.

Antes y después

Él mismo lo ha contado. “Hace años compartí con un amigo un pensamiento que hoy me parece absurdo: ‘Aquel que se despierta sin resaca el 1 de enero es que no está vivo’”.

Las cosas han cambiado. A sus 50 años, el presentador apunta que “la perspectiva de despertarme mañana sin una pizca de dolor de cabeza se me antoja celestial”.

Momentos excepcionales

Este escrito del mismo 31 de diciembre tras almorzar revela que JJ ha pasado el último día de 2020 “solo en casa con los cinco perros”. Eso no quita que no tuviera ganas de salir: “no es un día cualquiera y el cuerpo lo sabe”.

Tal vez por no poder celebrar o por hacer balance, el catalán ha recordado otra de sus Nocheviejas más tranquilas con su expareja, Paco, “Marisol y Antonio en un restaurante marroquí de París. Creo que era el primer fin de año que disfrutaba con P.”.

Recuerdos, melancolía y presente

Fuimos muy felices”, recuerda algo melancólico el rey de la telebasura justo el día en que recibió la visita de su antiguo novio, con el que aún se ve. “Me trajo cien euros que me han tocado de un número que había comprado en Gran Canaria. Intenté hacerle caso, pero es que estaba Sálvame en el ordenador (…) y la vista se me iba hacia la pantalla todo el rato”.

La soledad parece que le activó la memoria con su ex. Aun así, sostiene que prefiere un momento así que con resaca y rodeado de gente: “Creo que nunca me he aburrido tanto como en esas cenas de Nochevieja en las que había mucha gente”. Además, los suyos están a salvo, en sus casas. “No necesito nada más para estar tranquilo”.