El papel de Dalí en la iniciación sexual de Miguel Bosé

Miguel Bosé trata de limpiar su imagen dañada por su ferviente defensa del negacionismo del Covid y de los beneficios de las vacunas. Libros autobiográficos, programas de televisión y, en breve, una docuserie.

Las anécdotas de su vida muestran el lado más tierno y traumático del cantante. La relación con su padre es lo que más destaca. Aunque asegura que, en un momento de su vida, sus dos enemigos a los que combatir eran los dos, Luis Miguel Dominguín y Lucía Bosé.

En busca de iniciación

Es de sobras conocido que “el torero”, como él mismo lo llamó durante mucho tiempo, nunca toleró muy bien la sexualidad de su hijo. En una época donde el hombre tenía que ser heterosexual, cazador y valiente, Miguel no tenía muy claro que le gustaba, sólo que la caza no era para él. Aun así, lo forzó a ella, como también a tener sexo con mujeres.

Dominguín se juntaba con la élite artística de la España de la época. Entre ella estaba un famoso pintor, Salvador Dalí. En él, el diestro vio la posibilidad de que su hijo se hiciera un hombre.

Musa de Dalí 

Tal y como relata de nuevo el cantante en Bosé renacido, fue en casa del artista catalán donde Miguel tiene su iniciación sexual. Es cierto que Dalí era conocido también por su amistad con Lorca, pero también por su obsesión con las mujeres y Dominguín quiso aprovecharla.

En una visita a la casa del catalán, el torero tuvo una petición especial. Cuando el artista pidió a una de sus musas, Amanda Lear, allí presente, que fuera a enseñar “el jardín y los huertos” a Miguel, éste escuchó que padre decía “y que aproveche para hacerlo un hombre de una vez”.

El sexo y el fracaso 

Y así fue. Tal y como cuenta Bosé en el documental que Movistar+ estrena el 5 de septiembre, “fue una cosa bellísima”. Así lo vivió él, que “un beso llevó a un abrazo y sucedió. “Fue la primera vez que estuve con una mujer”, confiesa.

En cualquier caso, no sirvió para acercar al diestro a su hijo. Él esperaba que lo cambiara y que el joven Miguel alardeara de ese inicio sexual. No fue así y eso desesperó a Dominguín. Lo que iba a ser un logro se convirtió en una nueva derrota para el torero. Bosé hizo de su vida y sus relaciones sexuales lo que quiso.