Después de semanas en que la noche de expulsión era un auténtico duelo entre rivales. Secret Story ha vivido una noche de jueves mucho menos tensa. Sólo el recuerdo de las peleas entre Sandra Pica y Cristina Porta ha caldeado el ambiente.
Los enfrentados eran además dos amigos: Julen y Luis Rollán. Ambos se quieren tanto que les sabía mal incluso tener que encontrarse en esa tesitura por el otro. Y más a las puertas de la final.
Primera vez
El andaluz ha enfrentado la semana con su particular sentido del humor y eso que era la primera vez que se enfrentaba a este momento. Con Adara Molinero lejos, no tiene enemigos en la casa y se ha dedicado a no meterse en los conflictos, disfrutar de su relación con los Gemeliers y dar consejos a la audiencia sobre cómo gestionar las fiestas de Navidad. Eso sí, siente que va a salir.
“Estoy tranquilísimo y feliz”, señalaba. Y llega a decir que le daría pena que se fuera Julen así como que para él se acabara esta experiencia. “Es la experiencia más increíble que he vivido en toda mi vida”, asegura. Lo que no se esperaba era que le comunicaran todo lo que había pensado en el clan Pantoja en las horas previas.
Expulsado
Por su parte, Julen sólo ha tenido algún que otro roce con Cristina Porta, a la que hace tiempos que no se cree. Lo que sí ha hecho ha sido disfrutar de su relación con Sandra, con quien vive unos dulces momentos.
La audiencia no le tenía muy claro. Sólo por un 52,7% de los votos los espectadores de La casa de los secretos han decidido que el expulsado sea