El paso de Anabel Pantoja por el plató de Sálvame es un sinvivir. De todos los años que lleva la sobrinísima como colaboradora televisiva, este ha sido sin duda el más difícil. Su paso por el programa empezó como la voz directa de la familia Pantoja en el conflicto entre Kiko Rivera y la tonadillera, pero ha acabado siendo un ataque constante hacia su vida.

En un primer momento, trataron de reventar su amistad con Belén Esteban --otra que tiene su continuidad en Sálvame en el aire--, la acusaron de estafar a sus seguidores con una línea de joyas falsas, han jugado con la posibilidad de que esté embarazada, hacen con ella lo que quieren... Y por todo esto y más, Anabel Pantoja estaría a un solo paso de abandonar el programa.

Las jugarretas de la última semana

Anabel Pantoja ha amenazado en varias ocasiones con abandonar Sálvame, y ahora su puesto de trabajo vuelve a estar en duda. La sobrina de Isabel Pantoja no está cómoda ni en el plató ni con sus compañeros, y más tras el empeño del programa por desacreditar su línea de joyas vendiendo que son copias baratas.

Pero eso no ha sido todo esta semana. La colaboradora subió una imagen a Instagram para criticar a los que se meten con su peso --una indirecta hacia Kiko Matamoros, que parece ser su némesis-- y el programa hizo que se sometiera a un test de embarazo trucado. En directo, dio positivo. En casa, negativo. Y Sálvame tuvo la gran idea de hacerle una ecografía en directo, donde le dijeron que estaba de 25 semanas segundos antes de revelar la verdad, que no había nada.

La tensión con David Valldeperas

Todo ello es un cúmulo de situaciones, burlas y feos por los que Anabel Pantoja habría dicho basta. Después de negociar reducir su participación en el programa a los lunes y los martes, el director de Sálvame, David Valldeperas, trató de que acudiera a la emisión del miércoles para arreglar la tensión.

El motivo fue que la sobrinísima arremetió contra el equipo del programa y los tachó de poco profesionales por llevar a un supuesto tasador para que comparara sus joyas. Unas palabras que no sentaron bien a sus compañeros, pese a todo lo que le están haciendo pasar. Pero no solo rechazó ir al plató un miércoles, si no que tampoco quiso entrar ni por llamada ni por videollamada.

"Me voy a mantener al margen"

¿Cómo se pudo saber? Porque el programa, ante la negativa, decidió emitir la conversación telefónica. En ella, Anabel alegó tener planes para no poder atenderlos, pero también reiteró que el supuesto anillo analizado por el tasador no era suyo y que ya estaba cansada del tema.

"Si queréis joderme, pues joderme, no pasa nada. Estás con las joyas, con las joyas y con las joyas, no voy a hablar más de eso, solamente que las voy a seguir vendiendo. Estoy hasta el c... No quiero ofender a nadie más y por eso me voy a mantener al margen", dijo Anabel, a su manera para pedir disculpas pero dejando entrever que lo que verdaderamente le afectó fue la discusión que tuvo con sus superiores. ¿De qué se habrá quejado? ¿Se plantará frente a la persecución que está viviendo? ¿Dejará Sálvame?