Kiko Rivera aprovecha el cáncer de su suegra para ser infiel a Irene Rosales

Desde hace mucho tiempo Kiko Rivera no está bien. Una delicada situación personal, que se remonta a finales de 2019, y profesional, marcada por la pandemia del coronavirus y que le ha obligado a pedir la ayuda de autónomos al Gobierno.

Un infierno del que ha hablado durante la noche del sábado 17 de octubre en el programa Sábado Deluxe. Un paso por Telecinco que también le ha servido para ganar una elevada cantidad de dinero, y rehacerse del duro bache económico que atraviesa. ¿Cómo te quedas?

Kiko Rivera habla con otras

Hace varios días, el programa Sálvame se hizo eco de unos supuestos mensajes subidos de tono que Kiko Rivera se habría intercambiado con una expareja suya, Techi. Un cruce de palabras que el cantante ha negado rotundamente a su paso por Telecinco. Sin embargo, sí ha reconocido que, a finales del 2019, aprovechando una crisis sentimental con su mujer, Irene Rosales, tonteó a través de las redes sociales con una camarera de su discoteca de Sevilla, Hoyo. Un bache de pareja marcado por la enfermedad de la madre de su mujer, Mayte, quien perdió la vida en febrero del 2020 tras una larga lucha contra el cáncer.

"No he tenido nada con ella pero me pilló en un momento en el que no estaba bien con Irene", ha defendido Kiko Rivera, a su paso por Sábado Deluxe, haciendo referencia a Alicia, la camarera de la discoteca Hoyo con quien se mandó mensajes subidos de tono. "Tonteé con ella y me voy a sentir culpable de ello hasta el día que me muera", ha añadido el hijo de Isabel Pantoja. "Nunca me cansaré de decir que mi mujer es lo mejor que me ha pasado y yo no siempre me sé comportar", ha sentenciado el hermano de Chabelita. 

Kiko Rivera y el mundo de la noche

Durante mucho tiempo, el hijo de la tonadillera se ha dedicado a trabajar en el mundo de la noche, ofreciendo conciertos y bolos en diferentes salas de fiesta y discotecas de España. Un mundo del que ahora no quiere saber nada, porque no solamente le lleva a cometer supuestas infidelidades, sino también a tontear con las drogas. Algo que no quiere volver a hacer. "Sigo teniendo tentaciones por las drogas y es algo que me está costando la maldita vida. Hay noches que no duermo y lo paso mal. Por esto no quiero volver al mundo de la noche", ha soltado Kiko Rivera, quien ha reconocido que "me han ofrecido rayas miles de veces".

Un problema con las sustancias tóxicas que se suma a la bajísima autoestima que tiene. Algo que le llevaría a hablar con otras mujeres, a espaldas de Irene Rosales, para sentirse querido y deseado. "He sido un gordito feliz toda mi vida. Nunca me he sentido un tío atractivo y siempre que se ha acercado alguien ha sido por conveniencia. La gente se acerca por interés", ha rematado el hijo de Isabel Pantoja. Teniendo en cuenta la delicada y alarmante situación que atraviesa, ¿se pondrá en manos de expertos para que le ayuden a salir adelante?