Hace poco más de dos semanas que Ana Obregón se está acostumbrando a su nueva y dura vida, tras la muerte de Aless Lequio. Un fallecimiento que sentó como un terrible mazazo a la intérprete y que se produjo el pasado miércoles 13 de mayo en Barcelona.
Desde entonces, Ana, como es normal, no levanta cabeza. Por este motivo está siendo arropada por todos sus familiares y amigos más allegados. Un durísimo bache que combina con escapadas a diario al cementerio para recordar a su hijo, a quien estaba muy unida.
Ana Obregón, rota de dolor
El sábado 16 de mayo tuvo lugar en Madrid el entierro del joven, tres días después de perder la vida en la ciudad condal tras dos duros años de lucha contra el cáncer. Una despedida muy amarga, marcada por la crisis del cronavirus. Y es que siguiendo con el protocolo, solamente tres personas pudieron dar el último adiós a Aless. Fueron su madre, su padre y la que fuera su pareja Carolina Monje, con quien empezó a salir a finales del 2018.
Sin embargo, Ana Obregón no se ha olvidado de su hijo ni un solo día, quien ha dejado un vacío irreemplazable en su familia. Por este motivo, rota de dolor, acude a diario al cementerio donde descansa el cuerpo sin vida del joven, para recordarle y tenerle más presente que nunca. Así se puede apreciar en las fotografías que se publican en la revista ¡Hola!. Unas desgarradoras estampas en las que Ana, camuflada bajo unas oscuras gafas de sol, llora delante de todas las flores que adornan el sitio donde descansa Aless, quien falleció pocas semanas antes de cumplir los 28 años de edad.
Los planes de Ana Obregón
Lo que le viene ahora a la intérprete no es nada fácil, puesto que tendrá que acostumbrarse a vivir sin la presencia de su hijo, a quien estaba muy unida. Por este motivo sus hermanas, Amalia y Celia, quienes viajaron con ella a Barcelona, no se separan de ella en ningún momento. Tampoco lo hace Alessandro Lequio, quien acude a visitarla a diario. Eso sí, el italiano, tal y como le hubiera gustado a su hijo, está intentando volver poco a poco a la normalidad y ya se ha reincorporado a su puesto de trabajo en El Programa de Ana Rosa.
Algo que por el momento no ha hecho Ana Obregón, quien tomó la decisión de posponer su obra de teatro Falso Directo, que estaba previsto que se estrenase en el teatro Amaya de Madrid el próximo agosto. Y es que la intérprete, a día de hoy, no deja de pensar en el duro golpe que le ha deparado la vida tras dos años de incansable lucha contra el cáncer. Por este motivo, y según se ha podido saber, es muy probable que Ana, para intentar recuperar fuerzas, se desplace hasta Mallorca para pasar el verano donde la familia dispone de una bonita residencia en la Costa de los Pinos. Una desconexión que no será nada fácil puesto que seguro recordará muchos de los momentos compartidos con su hijo. Y es que ambos, en verano del 2019, se trasladaron hasta Mallorca, tal y como se puede apreciar en la fotografía en la que los dos aparecen sonriendo en la piscina.