Propuestas en la cocina con soja texturizada para no acordarse de la carne
Esta legumbre fuente de fibra y proteínas vegetales, es baja en grasas saturadas y sal
17 junio, 2021 21:50La cocina nunca dejará de sorprender, no solo con nuevas recetas e innovaciones culinarias sino también con nuevos ingredientes. Elementos que en la mayoría de los casos surgen o se producen para satisfacer las necesidades de todo tipo de consumidores o comensales. Y uno de esos ingredientes es la soja texturizada que ha ganado en los últimos tiempos mucha popularidad entre aquellos que son veganos y vegetarianos o bien, simplemente quieren ir quitando algo de carne de su dieta semanal.
En este caso es de la harina de soja de donde se obtiene este ingrediente también conocido como carne de soja. ¿Cómo se consigue? Lo primero de todo es extraer el aceite de las habas de esta legumbre y una vez refinado este tiene un aceite aparte. A continuación, la parte sólida restante pasa por un proceso denominado de extrusión; o dicho de otro modo, se somete a altas temperaturas, sufre una presión, texturización y una hidratación final. El resultado que se obtiene es la soja texturizada que uno puede encontrar en infinidad de supermercados.
Los beneficios de esta legumbre
Como se ha dicho en líneas anteriores se trata de un producto alimentario (una legumbre para ser exactos) muy demandado por aquellos consumidores que no quieren comer carne por una cuestión de principios o bien sí que comen productos cárnicos, pero quieren ir reduciendo ese consumo. La soja texturizada podría ser como la alternativa perfecta y además saludable. Y es que entre sus ventajas nutricionales se puede mencionar el hecho de que sea un ingrediente natural, con pocas grasas saturadas y sal y que además destaca por su aporte de fibra y proteínas.
Sabiendo esto, en los establecimientos de alimentación ya se puede encontrar soja texturizada en diversos formatos (ideales según su tamaño para hacer una preparación u otra) o bien como parte protagonista de platos ya preparados, por ejemplo albóndigas que bien podrían ser de carne; pero no lo son. Lo normal es comprarla ya envasada y deshidratada sin ningún tipo de sabor o especia para luego ser preparada y cocinada en casa al gusto según la receta que se vaya a cocinar.
¿Cómo se prepara?
Precisamente, esa falta de sabor o aroma hace que la soja texturizada necesite prepararse correctamente para que sea un plato apetecible. Y esto no reviste de mayor complicación ni tampoco hace falta ser todo un maestro cocinero para preparar recetas sabrosas y deliciosas. Y ni tampoco mucho tiempo en la cocina. El primer paso, cuando sobre todo está deshidratada, es ponerla en remojo para añadirle el agua que no tiene. En este caso la proporción acertada es similar a cuando se prepara arroz (el doble de líquido) y se deja así unos 15 minutos.
Pasado este tiempo ya está lista para añadir el resto de condimentos e ingredientes. Eso sí, antes de mezclar todo conviene pasar la soja por un colador para retirar el exceso de agua que pueda quedar; al tiempo que se presiona suavemente con un papel de cocina. Pero claro, sin pasarse no sea que quede demasiado apretada y seca y entonces no habrán servido para nada los pasos anteriores. Una vez hecho esto se puede, antes de pasar a otra elaboración, sazonar sin miedo (con cabeza) ya que al tener un sabor suave no eclipsará al resto de ingredientes que la acompañen.
Recetas con soja texturizada
Ese mismo proceso de hidratarlo en agua se puede hacer directamente en el caldo de cocción de una receta o con una salsa de tomate, por ejemplo, casera que se vaya preparando para hacer pasta boloñesa. La receta es la misma solo que en lugar de usar carne picada como es todo un clásico de este plato italiano lo que se hace es falsear, por así decirlo, ese ingrediente clave y usar en su lugar soja texturizada. El resultado, salvando las distancias, es prácticamente el mismo.
Otra buena idea es, esa soja ya hidratada usarla para hacer albóndigas o hamburguesas vegetales totalmente diferentes de las de toda la vida o añadirla a platos con arroz, a los exóticos pokes (una ensalada japonesa que suele llevar aguacate, arroz, atún o salmón crudo, cebolla roja...), preparar berenjenas rellenas acompañada también de verduras o darse un homenaje en una cena típicamente mexicana y preparar unos deliciosos burritos con soja texturizada. Todo un mundo de recetas las que se pueden hacer con esta legumbre.