La crisis de los chips se agrava: la industria se prepara para un nuevo desabastecimiento
La triple guerra comercial entre China, Europa y EEUU genera nuevas tensiones en el complejo mercado internacional de los semiconductores
6 noviembre, 2022 00:00La industria española se prepara para un nuevo desabastecimiento de microchips. La crisis de los semiconductores vivida durante la pandemia nunca se ha cerrado y en los próximos meses se espera que se agrave, con nuevos encarecimientos y escasez de componentes electrónicos avanzados necesarios para producir coches, móviles y todo tipo de productos electrónicos.
El motivo es la guerra comercial entre Xi Jinping y Joe Biden. "Mientras China y Estados Unidos se van matando el comercio, a nosotros nos queda estar a la espera, pero los precios pueden subir y la oferta disminuir por no tener disponibilidad de chips", señala Cristian Castillo, profesor de Logística de la UOC.
Crece la demanda
Washington ha limitado el uso de microchips avanzados estadounidenses --todavía líderes mundiales-- por parte de empresas tecnológicas chinas y las cadenas de suministro se están adaptando a la hermetización de los bloques oriental y occidental. Pero "en el sector de los semiconductores, todas las empresas están interrelacionadas y no es tan fácil decir 'te dejo de comprar a ti'", subraya Castillo. Encontrar alternativas toma tiempo.
El especialista explica que más allá de la guerra comercial, EEUU no quiere que China pueda utilizar esta tecnología para suministrar armamento a Rusia en plena guerra de Ucrania. Aun así, impactará en la industria, que además deberá hacer frente al aumento de la demanda de semiconductores derivada del impulso a los vehículos eléctricos.
Así se vive en China
"Todo el mundo está nervioso porque las sanciones de EEUU hacen que se tengan que cambiar los canales de distribución", señalan fuentes de Huawei. La tecnológica china no sufrirá el impacto directo de las nuevas sanciones de Biden, ya que vive un veto de Washington desde 2020.
Sin embargo, en el fabricante asiático recuerdan que "la cadena de suministro es global, si afecta a un país, acabará afectando a todo el mundo". "No creo que las sanciones ayuden", zanjan desde la marca, que lamenta la "presión" a la que les somete EEUU.
La UE choca con EEUU
Fuentes del Parlamento europeo aseguran que la Administración Biden ha aprovechado su propia legislación de medidas contra la inflación como arma en la guerra comercial que mantiene con Pequín. No es la única guerra comercial que libra Washington, pues tiene un segundo frente, más discreto, contra la Unión Europea.
Prueba de ello son los movimientos del Gobierno de EEUU para que Tesla no abra finalmente una factoría en España, sino que lo haga en suelo estadounidense, en un momento en el que está en juego también la planta de Seat. La próxima contienda de esta triple guerra comercial será la nueva normativa europea de diligencia debida, que compañías chinas como Huawei y Oppo siguen con preocupación pues el Viejo Continente es un mercado importante al que distribuyen productos tecnológicos como por ejemplo drones para la agricultura.