Lo que Colau esconde de su 'funeraria exprés': en Madrid ha fracasado
La nueva empresa municipal de la capital, creada por Manuela Carmena en 2016, ha perdido ingresos, cuota de mercado, inversión y plantilla pese a las ayudas públicas
25 febrero, 2019 00:00Es lo que no cuenta Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, del proyecto de funeraria exprés de su gobierno local. Uno de los espejos clave que oculta a la ciudadanía, pese a la agresiva campaña de su partido, Barcelona en Comú (BComú) contra el PSC para que salve la iniciativa, que se votará el miércoles en un pleno extraordinario en la Ciudad Condal. Soslaya que un proyecto casi calcado de servicios funerarios 100% públicos en Madrid ha pinchado y no funciona.
El Ejecutivo local de Ahora Madrid en la capital retomó toda la gestión de su empresa mixta funeraria y de cementerios el 16 de septiembre de 2016. La Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios SA (EMSF) fue la primera remunicipalización del gabinete de Manuela Carmena. Para ello expulsó a Funespaña, que controlaba el 49% del capital desde 1966, por otro 51% el mayor consistorio de España. Alegó entonces la alcaldesa la "deficiente conservación" de los 14 cementerios de Madrid --en Barcelona hay nueve-- para tomar el control de la firma público-privada. Colocó a Fernando Sánchez como gerente.
Fracaso y preocupación sindical
El artefacto no ha funcionado. Solo 21 meses después de su creación, menos de dos años, trascendió que la EMSF 100% pública había perdido el 8,9% de cuota de mercado, como avanzó ABC. También se consignó una caída de ingresos de más del 9%: de 51 millones de euros en 2015, el último año en que el Ayuntamiento de Madrid y Funespaña operaron la empresa, a 2016, cuando la mercantil ya era totalmente municipal. El batacazo quedaba a dos puntos del umbral del -11% fijado como límite en el plan de empresa. Por otro lado, del 44% de servicios que copaba en 2014 pasó al 36% en 2017. ¿Qué explica este fracaso?
Manuela Carmena pilotó la primera 'remunicipalización' de Madrid: su funeraria / CG
Los consumidores desiertan de la funeraria pública de Madrid. El funerario es un sector con mucha población cubierta con seguros de deceso, por lo que el operador público flaqueó comercialmente en la contratación de servicios básicos, alquiler de salas de velas o extras como las flores o inhumaciones. Sin el soporte de una firma privada que interlocutara con un sector fuertemente penetrado por las aseguradoras, la EMSF se desmorona.
Tanto es así que en septiembre de 2018 trascendió que se hundía también el plan de inversión de 39 millones hasta 2020 prometido por Ahora Madrid en los 14 camposantos de la capital. El gobierno municipal anuló un crédito de 9,8 millones solicitado para costear parte de los 14 millones a inyectar en 2018. La decisión ha dejado cementerios muy deteriorados, como el de La Almudena, sin un lavado de cara de 6,1 millones. Y en esta instalación se han llegado a encontrar restos cadavéricos al aire libre por la degradación de la infraestructura, como avanzó Telemadrid.
No despega pese a las ayudas
Todo ello no lo denuncia Mapfre, vinculada a Funespaña, antiguo socio del Ayuntamiento de Madrid en la empresa mixta. Fue la propia Comisiones Obreras (CCOO), partidaria inicialmente de la toma pública de la funeraria, quien alertó de que el proyecto hace aguas. Negro sobre blanco, el sindicato advirtió en octubre de 2018 que la Empresa Municipal de Servicios Funerarios no llegaría al 40% de cuota de mercado fijada para este año. Agregó que la plantilla se ha reducido de los 525 empleados que tenían en 2015 a 500 tres ejercicios después, de los cuales 77 son temporales. Advirtió también CCOO de que la calidad cae en picado, con demoras en la recogida de difuntos "de hasta cuatro horas".
Todo ello pese a la subida de tarifas, que será del 2% este ejercicio sin contar el IVA, del 21% en los servicios funerarios desde 2012. Y a pesar también a que EMSF está dopada con subvenciones, la exención de pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y la bonificación del 99% del Impuesto de Sociedades, beneficios de los que los operadores privados no gozan.
Votación el miércoles
Esta información la escamotea el gobierno municipal de Barcelona pese a que el propio gerente de la EMSF particiṕo en un acto preeelectoral con Eloi Badia, concejal de Presidencia y cerebro de la funeraria exprés, el pasado 14 de febrero en la Ciudad Condal. Este político ha prometido una rebaja de precios del 50% en la capital catalana --algo que no ha ocurrido en Madrid--, además de menos "precariedad laboral" --algo que tampoco se ha producido en el proyecto que quiere copiar--.
Está por ver cómo influirá esta información en el pleno extraordinario del miércoles, donde Badia someterá el proyecto al voto de la oposición municipal, aunque la mayoría de partidos ya han anunciado que le darán la espalda.