Aspecto de uno de los catálogos de Privalia.

Aspecto de uno de los catálogos de Privalia.

Confidente VIP

Privalia perdió en 2014 la cifra récord de 126 millones

La compañía es líder en el mercado español de venta de moda online, pero su cuenta de resultados sigue en negativo

3 noviembre, 2015 00:00

El outlet Privalia es líder destacado del mercado español en la venta de moda por internet, hasta el punto de que su web acapara casi la cuarta parte del negocio de la ropa en línea. Nueve años después de su lanzamiento, esta condición de primer espada del sector no ha acarreado beneficios a la casa. Por el contrario, Privalia es una máquina de perder dinero.

Varios son los motivos de esta deplorable situación. Por un lado, la errática política de expansión internacional, que le llevó en 2011 a desembarcar en Alemania por todo lo alto. Adquirió la firma local Dress For Less, con un enorme coste de 120 millones de euros, de los cuales pagó 85 en efectivo y el resto en acciones de la propia Privalia, que entregó a Mirco Schultis y Holger Hengstler, los dos dueños de la firma alemana.

Apenas el 20% del valor de compra

A la sazón, el valor razonable de Dress For Less era en realidad de 27 millones. El resto correspondió al fondo de comercio, es decir, a la prima satisfecha por entrar en el mercado germano y por la fuerza laboral de la sociedad comprada.

La mala marcha del negocio de Drees For Less, debida a la feroz competencia existente en aquel país, obligó en 2014 a provisionar la totalidad del fondo de comercio y darlo por irrecuperable, con el consiguiente impacto en la cuenta de resultados.

La agencia de viajes

Otro factor negativo fue el abordaje de actividades paralelas a la moda, como una agencia de viajes llamada Privalia Travel. Se abrió en 2011 en España con expectativas de extender los tentáculos a Italia, Brasil y México. Dos años después, hubo que liquidar el negocio por las fuertes pérdidas que estaba experimentando.

Lucas Carné y José María Villanueva, fundadores de Privalia y principales gestores, vienen anunciando prácticamente cada año la salida a bolsa, pero el intento siempre acaba en agua de borrajas. También pregonaron ambiciosos planes de expansión por Francia, Gran Bretaña, Benelux, Polonia, Países Nórdicos y Colombia. Al final hubo que desecharlos todos.

Volver al negocio central

Ahora, en otro singular bandazo, sostienen que Privalia va a olvidarse de toda aventura y se focalizará en los cuatro mercados donde tiene presencia, esto es, España, Italia, Brasil y México. Además, la compañía se centrará sólo en sus negocios medulares de moda, complementos y decoración. La filial alemana está a la venta, aunque ni de lejos se espera recuperar la inversión.

Desde el nacimiento de Privalia en 2006 hasta la fecha, la empresa se ha financiado mediante siete rondas de captación de recursos, merced a las cuales consiguió recaudar 286 millones de varios grupos de inversores. En su corta existencia, la empresa no ha cerrado un solo ejercicio con números negros y ya acumula unas pérdidas consolidadas de 200 millones.

Más ventas, más pérdidas

En 2014, las ventas del grupo subieron de 364 a 414 millones, pero a la vez el déficit se disparó de 1,9 a 126,8 millones, por los avatares de la subsidiaria germana. El balance del ejercicio se cerró con unos fondos propios negativos de 34 millones, por lo que los accionistas habrán de rascarse el bolsillo para restablecer el equilibrio patrimonial.

El cuerpo de socios incluye a General Atlantic Cooperatief, con el 34,6%; Grupo Highland, 14%; Sofina, 8,5%; y Nauta Tech, 6,9%. Carné y Villanueva mantienen el 5,95% cada uno. La plantilla se compone de 1.100 empleados.