Pérdidas en la empresa de aguas de David Madí
El expolítico no ha cumplido las expectativas del accionista y cesa como presidente a finales de octubre
12 octubre, 2022 00:00Companyia General d’Aigües de Catalunya, presidida por el expolítico convergente David Madí, registró en 2021 un ejercicio desfavorable. Los ingresos experimentaron un alza del 6%, pero los gastos lo hicieron a un ritmo mayor.
En consecuencia, los estados contables se saldaron con números rojos. Es el segundo déficit que contabiliza la casa en el último trienio.
Depuradoras y regadíos
Aigües de Catalunya tiene el cuartel general en el paseo de Gracia de Barcelona. El año pasado facturó 20,4 millones. Las actividades que progresaron son las relativas a trabajos por cuenta ajena.
Se trata de obras de construcción de nuevas estaciones depuradoras, así como el mantenimiento de instalaciones de riego en Tarragona.
Cambio de signo
Los resultados económicos se dieron la vuelta y entraron en terreno negativo. El de explotación viró de 41.000 euros de beneficio a 205.000 de pérdida.
Patrimonio
El resultado neto antes de impuestos y créditos fiscales arrojó un déficit de 126.000 euros, cuando un año antes lucía un superávit de 103.000.
Año | Ventas | Resultados |
2021 | 20,4 | -0,068 |
2020 | 19,2 | 0,073 |
2019 | 17,7 | -0,038 |
2018 | 17,2 | 0,59 |
2017 | 18,6 | 0,34 |
2016 | 14,3 | 0,53 |
2015 | 12,9 | 0,4 |
El balance de Aigües de Catalunya consta de unos fondos propios de 16,3 millones y unos pasivos financieros de 2,7 millones.
La entidad captó cuatro nuevos contratos de gestión y suma 43. Su negocio medular consiste en el abastecimiento de agua potable a 25 municipios catalanes, dos más que el año anterior.
Fundadores
Aigües de Catalunya la constituyeron en 1993 dos consorcios, Aguas de Valencia y la constructora barcelonesa Comsa, a la sazón propiedad de la familia Miarnau. Ambos grupos pretendían penetrar en el mercado catalán y arrebatar clientela a Agbar.
La alianza no funcionó. Tras muchos lustros bregando y frutos exiguos, Comsa decidió retirarse. En 2017 vendió su paquete del 50% a Aguas de Valencia e hizo mutis por el foro.
David Madí entra en escena
Eugenio Calabuig, líder del conglomerado levantino, tuvo entonces la ocurrencia de fichar como presidente ejecutivo a David Madí.
Madí había ejercido antes de político convergente y mano derecha de Artur Mas, que lo encumbró a la secretaría de comunicación y estrategia del Govern.
Trasiego de influencias
Los conocimientos de Madí sobre el mundo del agua, las plantas potabilizadoras y las redes de distribución eran más bien escasos, pero eso carecía de importancia.
Calabuig pretendía aprovechar la capacidad de interlocución e influencia de un personaje como Madí, que se mueve como pez en el agua en las altas esferas de las administraciones de la región.
Revocación
Sus actuaciones al frente de la compañía no han colmado las aspiraciones de Calabuig, y finalmente éste ha señalado la puerta de salida.
En mayo último le despojó de las facultades ejecutivas. El cese definitivo como presidente se prevé para finales del presente mes.
Investigaciones de la fiscalía
Al margen del menguado desempeño empresarial, Madí arrastra dos pesados lastres. Conciernen a sendas imputaciones judiciales. Una de la fiscalía europea, por un presunto fraude cometido con las subvenciones de la UE.
Y la otra del ministerio público español, que le achaca su participación en una trama de facturas falsas con la productora audiovisual Triacom, dirigida por Oriol Carbó, exgerente de TV3. Por este asunto, la fiscalía pide dos años de cárcel para el intermediario Madí.
Órgano de gobierno
El consejo de administración de Companyia General d’Aigües de Catalunya se compone de una decena de vocales. Todos ellos representan los intereses del magnate Calabuig.
Los dos únicos que revestían en 2021 la condición de altos directivos son David Madí y el consejero delegado Marc Pifarré Estrada.
Emolumentos
Este último ocupa el puesto por recomendación directa de Madí.
Entre ambos se repartieron el año pasado una paga de 327.000 euros, similar a la de 2020.
Fomento Urbano
Eugenio Calabuig Gimeno es un empresario y financiero de Castellón.
Articula su frondoso grupo por medio de la sociedad hólding Fomento Urbano de Castellón, que está dotada de unos recursos propios de 140 millones.