Josep Maria Farré y el logo de KKH con el Palau Castanyer de fondo
El tercer infortunio de Josep Maria Farré (KKH), el gran señor del inmobiliario catalán
El exdirectivo de Renta Corporación no encuentra el tono en Barcelona y sale trastabillado en su operación en el emblemático Palau Castanyer
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Josep Maria Farré, el gran lord del inmobiliario catalán, mantiene un rumbo errático en Barcelona, su ciudad. El presidente de KKH Property Investors suma un nuevo traspié con la venta del emblemático Palau Castanyer, en la confluencia de Portal de l’Àngel y Portaferrissa, en el que ha perdido 20 millones de euros.
El exdirectivo de Renta Corporación compró este inmueble en 2018. Durante dos años, lo reformó para que una tienda de moda pudiera abrir su flagship en Barcelona. Con dos plantas, 3.000 metros y un atrio interior, es uno de los mejores activos de la ciudad, ubicado en una de las mejores intersecciones del centro.
Sin embargo, una vez terminó la rehabilitación KKH se topó con la pandemia y nunca llegó a explotar el activo, que permanece cerrado a cal y canto desde entonces. La firma se dejó 40 millones de euros en la compra y la reforma, por lo que la operación les ha hecho perder 20 millones, más otros tantos que ha dejado de ingresar desde entonces.
Uno de los motivos que explican el cierre del inmueble durante este tiempo es "el desproporcionado alquiler" que pedía KKH. Fuentes del mercado inmobiliario explican que la suma exigida por Farré era de 2 millones de euros al año.
Josep Maria Farré, presidente de KKH Property Investors
La cifra era elevada porque Farré debía contentar a su inversor, la gestora londinense Aermont, quien le exigía un retorno inmediato del dinero. Ha sido precisamente Aermont quien, cansado de perder tiempo y dinero con el activo, ha forzado y negociado la venta del activo a AX Partners, la gestora de Aleix Recasens, aunque ello supusiera un boquete de 20 millones.
Ahora, AX Partners relanzará el inmueble con un coworking en las plantas superiores y un operador comercial a pie de calle, que ya busca. Según ha podido saber este medio, el precio de alquiler será mucho más barato que el que pedía KKH.
Otros traspiés
Esta aparatosa operación se suma a los dos grandes agravios que han marcado la operativa de KKH en el último decenio en Barcelona. El primero fue su fallido hotel Four Seasons en Diagonal con paseo de Gràcia, en la antigua sede del Deutsche Bank que compraron por 90 millones, y cuyo proyecto tumbó luego Ada Colau. Finalmente, lograron abrir los apartamentos Mandarin Oriental, si bien su rentabilidad es menor. El año pasado, además, se desprendieron del local comercial en sus bajos, ocupado por la marca de relojes de lujo Patek Philippe.
El segundo resbalón llegó tras la riña con la familia Bernat, dueños de la Casa Batlló y expropietarios de Chupa Chups, como detalló este medio. El activo de la discordia fue la exsede de otro banco: en este caso, la de Barclays, en el número 45 de paseo de Gràcia. Los Bernat convencieron a los herederos de Vila Casas --anterior propietario-- y birlaron así el inmueble a Farré, quien quería una galería de arte en pleno centro.
Viaje al retail y oficinas
KKH se ha visto obligado a replegarse hacia dos sectores en los que no tiene una experiencia tan demostrada: el retail y las oficinas, debido a la moratoria hotelera y a la reserva del 30% a pisos sociales en inversión residencial.
Las Mandarin Residences, de KKH, también en el Paseo de Gracia
Por otro lado, la hostelería, que otrora había aportado grandes rentabilidades a los fondos, es ahora "un mercado imposible", explican fuentes del mercado, debido a que ya está todo "copado" y se exigen altas inversiones para poder hacerse un hueco, lo que imposibilita las rentabilidades inmediatas que buscan los fondos.
Madrid y Sevilla, otro tono
Mientras el rumbo de KKH es errático en Barcelona, en Madrid el vehículo firmó el Edition, el hotel de lujo en la antigua sede del Monte de Piedad, en la plaza de las Descalzas. Lo vendió a Archer Hotel Capital en 2018 con elevadas plusvalías.
Más recientemente, el vehículo presentó su último gran proyecto: un hotel de lujo en la antigua Tabacalera de Sevilla, que prevé estrenar en 2026 tras la inversión de 250 millones de euros.