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Imagen de la playa de la Barceloneta Europa Press

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El extranjero de alto poder adquisitivo apuesta por Barcelona

Según un informe de Caixabank Research, Sant Gervasi-La Bonanova es la zona con mayor gasto

27 agosto, 2024 00:00

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El 80,8% de los visitantes que se alojaron en Barcelona durante 2023 fueron de origen internacional. Concretamente, las personas de Estados Unidos fueron la procedencia mayoritaria, por detrás del Reino Unido, Francia, Italia y Alemania. Según datos facilitados por el Ayuntamiento de Barcelona, el gasto turístico se elevó hasta los 9.600 millones de euros.

Respecto de la ocupación, en la capital catalana se firmaron unos 130.000 contratos del conjunto del sector turístico, la mitad de los cuales son de carácter indefinido. Un factor singular en el comportamiento de los visitantes es la estacionalidad. A partir de los sucesivos informes del centro de estudios de Caixabank, en Barcelona y en el resto de los principales destinos turísticos de España se detectan estancias más largas.

El interés por la zona de Sant Gervasi-La Bonanova

En la Ciudad Condal, los extranjeros han puesto el ojo en la zona de Sant Gervasi-La Bonanova. Para contextualizar este comportamiento, uno de los últimos documentos de CBRE plantea como Barcelona ha cerrado el primer semestre del 2024 con una inversión inmobiliaria de 967 millones de euros.

De cara al cierre del año, la previsión es superar los 2.000 millones. Otro ámbito empresarial que ha despertado el interés de los inversores internacionales es el de las residencias de estudiantes. Entre enero y junio, en la ciudad se han movilizado 219 millones de euros, una cifra que representa un incremento del 68,5%. Volviendo a los datos de la entidad bancaria, el visitante extranjero de larga duración no aparca el modelo tradicional de la segunda residencia, pero sí abre la puerta a otros formatos como el coliving.

En gran parte, los inversores han expresado su interés por qué se trata de una tipología de alojamiento que cumple con las nuevas realidades sociales. Se entiende por visitante de larga duración la persona que realiza una estancia de 48 días, en contraposición con los casi tres días de los turistas esporádicos. El gasto a largo plazo es de 1.729 euros y 180 para los de corta estancia.