La inflación cierra el bienio con mayores subidas en 32 años
Los precios han experimentado un incremento superior al 12% en dos ejercicios, inédito en la era del euro, y que no se veía desde finales de la década de los 90
13 enero, 2023 00:00Los dos años que han seguido a la pandemia del coronavirus han estado marcados, entre otros factores, por una espiral inflacionista que no tiene precedentes en la era del euro y que hace necesario viajar más de tres décadas hacia atrás en el tiempo para encontrar un fenómeno similar.
El Índice de Precios al Consumo (IPC) cerró 2022 con un incremento interanual del 5,8%, según la estimación inicial publicada a finales del pasado diciembre por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La cifra definitiva que se publique este viernes confirmará a buen seguro alzas acumuladas superiores al 12% en el indicador de inflación en los dos últimos ejercicios.
Recuperación intensa
Para encontrar un antecedente que supere esta marca hay que retroceder a los años 1989 y 1990, cuando la inflación sumó una subida del 13,4%, merced a avances del 6,9% y 6,5%, respectivamente, que registró por entonces el IPC.
El comportamiento de los precios durante los dos últimos ejercicios ha estado marcado por la intensidad de la recuperación económica a partir del primer trimestre de 2021, tras un 2020 de fuertes caídas de producción motivadas por la irrupción del coronavirus en todo el mundo.
El factor de la guerra
El repentino rebote provocó un incremento de los precios mayor del esperado, en especial en el campo energético, condicionado también por la falta de suministros que provocó un incremento prácticamente sin precedentes de la demanda, que derivó en una crisis de oferta, incapaz de cubrirla.
Aunque, sin duda, el factor que ha acelerado las alzas de los precios hasta situarlos fuera de control ha sido la invasión rusa de Ucrania, iniciada a finales del pasado febrero y que originó fuertes tensiones en los mercados de la energía, con la consiguiente alza de precios.
Este hecho motivó un frenazo en el ritmo de recuperación económica pero no detuvo la espiral inflacionista sino que, incluso, la alimentó.
La situación se agravó para la economía española, que ya venía de un 2021 que había cerrado con un incremento de la inflación del 6,5% en tasa interanaual.
Enfriamiento a golpe de alzas de tipos
La intensa intervención del Banco Central Europeo (BCE), que tuvo que echar mano de subidas de tipos de interés de una cuantía nunca antes vista en su historia, junto a la moderación de los precios de la energía gracias al tope a los precios del gas lograron enfriar el incremento de los precios, que llegaron a encadenar tres meses en cifras de dos dígitos.
Un movimiento que ha impedido males mayores pero que no ha podido evitar un repunte de precios sin precedentes en lo que va de siglo y que, además, aun está por cambiar de tendencia en el caso de la inflación subyacente, que ha finalizado 2022 rozando el 7%, más un punto por encima del IPC y en tendencia alcista.
El efecto IVA en los 80
En el caso del precedente más inmediato de un bienio tan inflacionista, la segunda mitad de la década de los 80 vino marcada por una notable alza de los precios por el efecto de la incorporación efectiva de España a la Unión Europea (por entonces, denominada Comunidad Económica Europea), que motivó la adopción de, por entonces, nuevas figuras fiscales como el IVA.
El ingreso en el selecto club también tuvo el efecto de la llegada de los fondos de cohesión, con un impacto notable en el crecimiento y el consiguiente recalentamiento de la economía, cuya trayectoria alcista e vio básicamente frenada por la crisis llegada tras el emblemático año 92, jalonado por los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla.