Nace Wiz Music: una plataforma musical que acerca artistas y fans

La compañía ofrece al público la posibilidad de invertir en sus grupos favoritos adquiriendo un porcentaje de tokens --activos criptográficos basados en la tecnología de cadena de bloques--. A cambio, las bandas se comprometen a pagar de forma mensual o semestral a sus mecenas, además de organizar actividades exclusivas para su comunidad. Lo que posibilita el blockchain es que este proceso se haga de forma masiva y multilateral a través de smart contracts --un tipo de contratos inteligentes que se ejecutan con independencia de sus firmantes--.

¿Cómo funciona?

Pero, ¿cómo surge el negocio? El retorno de la inversión procede de los royalties o ingresos que los músicos obtienen por los derechos de reproducción en plataformas de streaming como Spotify, Apple Music, Deezer y Youtube. En cada lanzamiento Wiz Music se queda una comisión que fluctúa entre el 5% y el 10% y firma contratos a cinco años para incluir toda la obra de los artistas en su catálogo. A cambio, estos obtienen otra fuente de financiación.

"Cada músico pone a la venta los $FAN tokens con un precio distinto en función de una fórmula que tiene en cuenta la cantidad de royalties y de los eventos que está dispuesto a ofrecer a sus fans", detalla Rovira. Aunque para evitar el acaparamiento de participaciones, se ha troceado hasta un millón la cantidad de tokens emitidos por banda. "De esta forma se evita que lleguen ballenas a comprar un grupo entero para especular y se reduce el valor inicial del token para permitir dar entrada a más inversores", sostiene el emprendedor.

Recompensas únicas

La principal métrica detrás del proceso es totalmente accesible: basta con consultar las escuchas mensuales en Spotify para calcular cuántos dividendos puede llegar a generar cada obra. La clave del proceso está en que los autores aprovechen la compra de tokens, por la cual perciben una asignación en euros, para reinvertir en sus proyectos musicales.

A cambio de esta financiación, sus admiradores ven crecer a sus ídolos, cobran de forma periódica un pago económico y disfrutan de recompensas únicas. "Chats en privado, encuentros personales e incluso acceso al backstage en los conciertos. Cada banda puede adaptar su oferta", explica Rovira. De esta forma se cierra un círculo virtuoso que pretende poner al día los clubs de fans a la vez que generar un negocio para todas las partes.

La plataforma Wiz Music de mecenazgo musical a través de 'tokens' / WIZ MUSIC

Asesores de peso

El proyecto ha sido apadrinado por importantes personalidades del mundo de la producción y el managing. Wiz Music tiene detrás a Iñigo Argomariz, fundador y consejero delegado de Getin, participada mayoritariamente por Warner desde 2008; Chris Ortiz, manager de Melendi, Manu Carrasco y Miguel Poveda a través de su empresa Riff Producciones; Tito Ramoneda, presidente y fundador de The Project, compañía que organiza festivales como el de Porta Ferrada y Voll-Damm Festival de Jazz, y Eugeni Casalmiglia, fundador y exdirector general de Ticketmaster.

Entre los próximos pasos de Wiz Music, que cuenta con un equipo de ocho trabajadores y oficina en Barcelona, está cerrar una ronda de inversión de 500.000 euros --el pasado abril captaron 300.000 euros en su primera operación financiera--, además de dar el salto a Latinoamérica. "Una banda española con más de medio millón de escuchas ya ha dado el salto a Latinoamérica. El siguiente paso natural es entrar en ese mercado", resume Rovira.