Empiezan las obras del polémico Tanatorio de Sants

Obras en marcha. Funeraria San Ricardo, vinculada al grupo Ocaso, ha iniciado las obras del polémico Tanatorio de Sants, que el operador quiere construir en la antigua fábrica Germans Climent, una nave novecentista situada delante de la Estación de Sants. 

Según han informado los vecinos contrarios a la transformación, la compañía ha arrancado los trabajos previos para reformar el espacio, que renacerá como sala de velas en mitad de una zona residencial, para desazón de los vecinos. Ello ocurre pese a los recursos judiciales contra el plan urbanístico que lo posibilita, ya presentado, y contra la licencia de obras, que los contrarios han anunciado que presentarán. 

En marcha

De esta forma, las obras del Tanatorio de Sants empiezan de la mano del desconocido operador que asume el riesgo de un revés en los tribunales al proyecto. La jurisdicción contenciosa aún no ha resuelto sobre la impugnación vecinal. Entre otros motivos, porque el Ayuntamiento de Barcelona no ha entregado la documentación que requiere el juez para estudiar los escritos de las partes. 

Los vecinos contrarios al Tanatorio de Sants, durante una protesta en Barcelona / TWITTER

Mientras el magistrado recaba información y decide, la intervención para transformar el recinto fabril ya se ha iniciado. Si la justicia fallara contra el armazón urbanístico o revocara la licencia de obras, los promotores deberían encajar los costes de la intervención. La situación se volvería compleja. 

Oposición

El potencial conflicto jurídico tiene lugar porque hay un belicoso colectivo de vecinos que se han opuesto desde el principio a la reconversión del equipamiento, que operaba anteriormente como instalación para niños con la marca Happy Park. 

Los residentes han afeado al ayuntamiento que permita el impacto en el barrio y que no vele por el correcto encaje urbanístico. Los contrarios han logrado garantías de que el operador, que tiene un extraño vínculo con el grupo asegurador Ocaso, pague la reforma de la plaza, pero no la cesión de toda la nave, como esperaban.