Un operario haciendo las primeras mediciones para construir el proyecto de tanatorio de Sants / CG

Un operario haciendo las primeras mediciones para construir el proyecto de tanatorio de Sants / CG

Vida

El polémico tanatorio de Sants vulnerará la normativa urbanística

El gobierno de Ada Colau tramita el proyecto pese a que incumple la ordenanza del AMB al encajar los coches fúnebres en un callejón

23 diciembre, 2021 00:00

El polémico tanatorio de Sants incumplirá la normativa de edificaciones del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y, pese a ello, el Ayuntamiento de Barcelona, que lidera la alcaldesa Ada Colau, le ha dado la licencia de obras, como informó el operador ayer

La instalación encajará el acceso de coches fúnebres en un callejón, lo que vulnera de forma flagrante la Ordenanza de Edificación del AMB tal y como advierten fuentes cercanas al proyecto. De forma concreta, su artículo 112. Este epígrafe establece que "la anchura mínima para los accesos para un solo sentido de circulación, que den a calles de menos de 12 metros de anchura, será de cuatro metros. En otros casos será de tres metros". En el caso del controvertido tanatorio de Sants, la entrada de las limusinas negras dará a la calle Puiggarí, que tiene tan solo ocho metros de anchura. El inversor ha previsto una entrada de vehículos de tres metros, hecho que incumpliría la ordenanza metropolitana. 

Un metro menos

Los mismos interlocutores cargan contra la iniciativa que impulsa la funeraria San Ricardo, vinculada al gigante asegurador Ocaso y a Hygeco España. Este último es uno de los proveedores de Cementiris de Barcelona, por lo que conoce la actividad en la ciudad. Es la normativa de edificación en su capítulo de accesos y rampas lo que chocaría con la remodelación de una nave industrial protegida, ya que es un bien cultural de interés local (BCIL).

Aportan datos sobre una problemática que es carne de contencioso. La calle Puiggarí mide un poco menos de ocho metros de anchura. Según las ordenanzas de edificación del AMB, que se pueden consultar en este enlace, el acceso rodado de los coches fúnebres, el llamado acceso técnico, debería tener un mínimo de cuatro metros de anchura. "Tendrá 3,53 metros entre pilares y 2,90 metros entre brancales", citan las mismas voces. Es decir, sin cambios de última hora en el proyecto que se ha entregado, no llegan al mínimo establecido. 

Los planos lo confirman

Este medio ha preguntado a Funeraria San Ricardo, cuyo nombre comercial actual es Proxima Serveis Funeraris, sobre este problema. El operador no ha contestado. En la nota pública que emitió al anunciar el tanatorio aseguró que daría un servicio "excelente". Casi al mismo tiempo, entregó su iniciativa con todo detalle a la Administración local para que pudiera analizar la remodelación de un inmueble que había acogido un parque infantil. 

El acceso que incumple la normativa, marcado en rojo / CG

El acceso que incumple la normativa, marcado en rojo / CG

En la página 130 del dosier, el operador funerario es donde dibuja el acceso técnico al Tanatorio en la calle Puiggarí que está en el centro de la polémica. El diseño de la entrada, en efecto, no rebasa los brancales, pero esto lo convierte en mucho más estrecho de lo que le pide la normativa. Si se quisiera ampliar, los promotores tendrían problemas porque se trata de un edificio está protegido con categoría B en el catálogo de patrimonio, remarcan los mismos interlocutores. Es decir, no se pueden tocar sus rasgos característicos.  

Obtiene licencia

El incumplimiento de la normativa urbanística no habría sido óbice para que el Ayuntamiento de Barcelona le conceda la licencia de obras. La autorización urbanística permitirá a su promotor comenzar las obras en enero de 2022, según ha informado la propia compañía. Antes, el Ejecutivo local también dio visto bueno al plan especial urbanístico integral (PEUI) del activo novecentista. 

Edificio Germans Climent, en el que se construirá el tanatorio de Sants

Edificio Germans Climent, en el que se construirá el tanatorio de Sants

Durante toda la tramitación, el gobierno municipal de BComú y PSC ha sostenido que las licencias eran un acto reglado y que, por lo tanto, no podía denegarlas. Esta afirmación de que la Administración no puede dilatar la burocracia administrativa de un proyecto inmobiliario contrasta con las decisiones políticas que se han tomado en otros puntos de la ciudad en proyectos de otro perfil, no ligados a las pompas fúnebres.

Es el caso de la rehabilitación del antiguo hotel Buenos Aires de Sarrià-Sant Gervasi que se quería convertir en hotel o la promoción de viviendas de la calle Encarnació de Gracia que también tenía el mismo fin, dos iniciativas que también han levantado polvareda en el mandato actual. En ambos casos, la Administración municipal demoró los trámites hasta que consiguió parar ambos proyectos, explican fuentes inmobiliarias. Desde el consistorio se ha llegado a explicar que las iniciativas no encajaban con su idea de ciudad y que habían procedido del modo anterior. En el primer caso, esta presunta actitud propició una denuncia que ha terminado con la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, imputada. En el segundo, la polémica se zanjó con acuerdo de compensación económica al promotor. 

Los vecinos recurrirán

Sea como fuere, el polémico tanatorio de Sants escribirá más páginas en la crónica política y social de Barcelona. Ello es así porque fuentes de la Plataforma STOP Tanatori de Sants indican a este medio que recurrirán la concesión de la licencia de obras, como ya ocurrió con la aprobación definitiva del proyecto, El primer escrito fue admitido a trámite por la sala contenciosa del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), como explicó Crónica Global

La batalla judicial se antoja larga. En la misma, los residentes plantearán argumentos como la protección patrimonial de la fábrica Germans Climent para detener la obra. Cabe recordar que los promotores buscan abrir puertas de acceso en la nave novecentista y diversas claraboyas que implicarían modifiicar el techo. Ante este hecho, el propio Colegio de Arquitectos llamó a respetar el conjunto. Asimismo, los contrarios alegarán pérdida de valor de sus viviendas y la disonancia que provocará en la vida social y económica del barrio para frenar la intervención. Todo estos argumentos se usarán para intentar frenar en los tribunales un proyecto que ya tiene luz verde para empezarse a ejecutar.