Los Borrell Miró-Sans, el ocaso de una saga de hoteleros de Barcelona
La rama familiar que desciende del empresario Carlos Borrell coloca el Hotel Alexandra de Barcelona tras una gestión controvertida, aunque retendrá silla en el Gremi
4 noviembre, 2021 00:00Son los Borrell Miró-Sans y encarnan el ocaso de una saga hotelera de Barcelona. La venta del Hotel Alexandra de Barcelona por 32 millones a Anpora, de Ricardo Portabella, operación que avanzó este medio, pone punto y final a una rama familiar que tenía fuertes posiciones en el mercado alojativo catalán. Hasta ahora, cuando la venta del último activo ha desnudado una gestión mejorable de los alojamientos vacacionales.
Es lo que indican fuentes del sector inmobiliario y afloran los datos del Registro Mercantil, que apuntan a una gestión cuestionable que mancilla una trayectoria empresarial remarcable en el sector turístico. Los Borrell Miró-Sans han colocado las sociedades del Alexandra a Anpora, de Portabella. Lo han hecho después de un descalabro que solo en parte tiene que ver con la pandemia del coronavirus.
Dividendo pese a las pérdidas
Los libros depositados en el Registro Mercantil dan diversas claves. A Hotels SA, la sociedad propietaria del Alexandra, perdió 1,4 millones de euros después de impuestos en 2020, año en el que la hotelería española mordió el polvo por la pandemia. Pese al quebranto registrado, el consejo aprobó un dividendo de 522.000 euros, el mismo que el entregado en 2019.
Ello, según fuentes jurídicas, genera polémica, pues la empresa tuvo que acogerse a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) para sobrevivir. De hecho, y según las cuentas públicas, la plantilla de A Hotels pasó de 70 personas a solo 24 el pasado ejercicio. Otros interlocuotres del sector bancario también aportan otro elemento: la remuneración a los accionistas se aprobó también tras pedir créditos al Instituto de Crédito Oficial (ICO).
La gestora, sin cuentas actualizadas
Preguntada por la cuestión, los actuales ejecutivos de los Borrell Miró-Sans no ha contestado a las preguntas de Crónica Global sobre por qué se tomó esa decisión. La retribución a los tenedores se cargó contra las reservas de la firma. "Ello descapitalizó la compañía", indican las mismas fuentes financieras conocedoras de la situación.
Hay más. La propietaria del Hotel Alexandra hizo maniobras cuanto menos discutibles y, al mismo tiempo, la gestora hotelera de esta parte de la saga, Hoteles Diagonal --Gestdiagonal SL--, no presenta cuentas al Registro Mercantil desde 2015. Ello sugiere también, según letrados consultados por este medio, poca estabilidad interna por la posible impugnación de los libros. De hecho, la venta del Alexandra a Anpora podría haber sido cuestionada por otros accionistas, cree el sector, cuestión que no ha podido ser cotejada por este medio.
Fin a una larga historia
Estas zozobras previas a la colocación del activo sito en la esquina de calle Mallorca y Rambla de Cataluña son el colofón a una trayectoria destacable en el sector hotelero. Hoteles Diagonal nace a finales de los años 60 en Barcelona. Su génesis se puede trazar hasta 1935, cuando se engendró Borrell Estudio de Arquitectura, una firma de diseño y ejecución de obras en diversos sectores, también el hotelero.
La sociedad gestora que controlan los Borrell Miró-Sans está actualmente en manos de la tercera generación de la familia, pero despunta un nombre al que se puede atribuir el crecimeinto de la explotadora, el de Carlos Borrell Calonge. El que fuera presidente de A Hotels y de Gestdiagonal consiguió agigantar un portafolio que comprendía el Alexandra, sí, pero también el Hotel Augusta, junto al Circuit de Catalunya de Montmeló (Barcelona) y el Palacio Conde de Torrejón, en Sevilla.
Siguen con silla en el Gremi d'Hotels
Los Borrell Miró-Sans, además, forman parte del Gremi d'Hotels de Barcelona. El puesto recae en Carolina Borrell, una de las hijas del empresario. Es vocal, sí, pero con voz tanto en la junta rectora como en el comité ejecutivo. Preguntada por la cuestión, la organización empresarial se ha limitado a confirmar que la directiva continuará porque sigue como directora del Alexandra pese a la compra por parte de Anpora.
Los descendientes del ejecutivo que lideró el crecimiento de la propìetaria y gestora hotelera retienen su influencia aunque hayan vendido y aunque hayan firmado, según el Registro Mercantil, una trayectoria llamativa. Lo hacen a diferencia de Jordi Mestre, presidente ejecutivo de Selenta Hotels, que cedió la silla de presidente tras vender su cadena a Brookfield este año. En contraste con Mestre, los Borrell-Miró Sans han preferido seguir en el poderoso lobi pese a no ser ya ni dueños ni gestores de ninguna empresa del sector.