El Gobierno irrita a las renovables con la reforma del autoconsumo colectivo
La rigidez del modelo propuesto para calcular la asignación de electricidad torpedea el despegue de una alternativa en auge
19 abril, 2021 00:00La reforma del Gobierno sobre el autoconsumo colectivo ha contrariado a las empresas de renovables. Los actores consultados por Crónica Global denuncian la rigidez del modelo propuesto por el Ministerio de Transición Ecológica, aunque esperan que a lo largo del proceso legislativo se perfeccione la orden ministerial.
Según datos de la UNEF (Unión Española Fotovoltaica), en 2020 se instalaron en España 1.539 megavatios (MW) de nueva potencia fotovoltaica bajo esta modalidad, un 30% más con respecto al año anterior. En concreto, el mercado doméstico ha experimentado un auge notable sumando el 19% de los nuevos MW, mientras que la industria y el comercio se han estabilizado en el 56% y el 23%, respectivamente.
Mirar a Francia
Precisamente para acompañar este despegue, el ecosistema enmienda la iniciativa del Gobierno. El conflicto parte de la definición de los coeficientes de consumo. Esto es, de la asignación de potencia en una comunidad de abonados que comparte placas fotovoltaicas.
Más de 60 operadores reunidos en la Alianza por el Autoconsumo demandan una modificación del borrador para que el sistema de cálculo de los coeficientes sea posterior al consumo energético, al modo de las regulaciones francesas y portuguesas.
Modelo rígido
Raquel Paule, secretaria de la plataforma y directora general de Fundación Renovables, expone con claridad la petición del sector. "Reivindicamos coeficientes dinámicos reales para impulsar el autoconsumo colectivo. La regulación pone trabas al desarrollo al obligar a realizar previsiones con un año de antelación que son complicadas de corregir", indica.
Pese a que la norma cambia los coeficientes fijos por otros variables basados en horas, el requisito de informar sobre los repartos horarios con 12 meses de antelación torpedea el avance de esta tecnología. La portavoz del think tank exige perfeccionar el modelo para aprovechar al máximo las condiciones climáticas idóneas de la Península, con su elevado índice de radicación y horas de sol en comparación con otros países de nuestro entorno.
Desarrollo paralizado
Esta rigidez establecida de antemano impide optimizar el gasto según variables tan fluctuantes como el teletrabajo o los hábitos domésticos de los inquilinos de una comunidad de vecinos. Como consecuencia de ello, se pierde la posibilidad de mejorar la rentabilidad de la inversión y de maximizar las cubiertas sobre todo en grandes ciudades, con muchos metros disponibles en sus edificios.
Rigidez que, además, va en detrimento de la implantación de una modalidad hoy por hoy paralizada en España. Según datos facilitados por UNEF, por cada cien instalaciones de generación, 99 son de título individual mientras que solo una lo es de forma compartida. En vez de ayudar al autoconsumo doméstico, los expertos consideran que la propuesta del Gobierno retrasará aún más el desarrollo de una alternativa clave para la conversión energética.
Críticas y elogios
María Colom, directora de proyectos y política energética de la UNEF, pone en valor el empeño del área dirigida por Teresa Ribera por favorecer el autoconsumo, pero reclama corregir con celeridad el enfoque normativo.
"El Real Decreto 244/2019 [modificado en su primer anexo por esta orden ministerial] funciona bien para la modalidad individual, pero no da incentivos para el autoconsumo colectivo. Esperemos que no se tarde en corregir el cálculo de los coeficientes del que, además, ya advertimos hace un año que no era positivo", señala. Preguntado sobre esta cuestión, el Ministerio de Transición Ecológica ha declinado hacer valoraciones. Sin embargo, la institución aclara en sus documentos que si se ha optado por esta opción ha sido para evitar dificultades y retrasos en la facturación.
Cálculo 'a posteriori'
Las empresas del ramo entrevistadas por este medio piden también revisar el modelo propuesto por el Ejecutivo central. Un portavoz de Holaluz, uno de los grandes operadores del ecosistema, establece las dificultades para elaborar un planning a 12 meses vista. "Hoy resulta imposible abordar de un año para otro el gasto anual. No sabemos cuándo nos iremos de vacaciones o cuándo pondremos la lavadora", señala.
"Los coeficientes deberían determinarse el día después, no el día antes. Debemos optimizar la energía, y para eso debemos hacerlo una vez realizado el consumo", sentencia.
Sector en evolución
La startup Solarmente suma otro argumento: el avance tecnológico reclama precisamente la instauración de un verdadero sistema de coeficientes dinámicos. Esta empresa ofrece una solución de blockchain innovadora basada en contratos inteligentes que permiten el cálculo de coeficientes de energía por horas utilizando los datos de los prosumidores.
"Nuestra I+D se centra en permitir las transacciones energéticas entre los futuros consumidores de SolarMente y sus vecinos. El autoconsumo compartido es el primero de muchos pasos en esa dirección y una muy buena noticia para nosotros ya que estamos desarrollando nuestro primer piloto". Ahora, se trata de que la legislación acompañe esta transición.