Seat urge apoyo a Moncloa para fabricar 500.000 eléctricos al año en España

Seat tiene un plan para su planta de Martorell: la producción de más de 500.000 unidades al año de un nuevo modelo de coche urbano y eléctrico a partir de 2025. Pero este objetivo pasa por contar con el apoyo decidido del Gobierno, con vistas tanto al estímulo de las ventas de este tipo de vehículos y al desarrollo de la red de puntos de recarga como a la célebre planta de baterías.

El presidente de Seat, Wayne Griffiths, considera esta cuestión absolutamente prioritaria, hasta el punto de sentenciar que este respaldo de Moncloa debe llegar en el transcurso del presente año para que la compañía pueda poner en marcha este plan.

Planta próxima a Martorell

“España no puede dejar pasar esta oportunidad”, ha recalcado Griffiths durante la presentación de resultados del fabricante filial del grupo Volkswagen. El ejecutivo ha especificado que las necesidades de Seat para poder llevar a cabo esta estrategia pasan por la instalación de una planta de fabricación de celdas de baterías en España y otra para el ensamblaje en los vehículos, que debería estar muy próxima a Martorell.

El máximo responsable de Seat ha recordado que actualmente España está a la cola de Europa en la venta de coches eléctricos y que también tiene pendiente desarrollar la red de puntos de recarga. “Queremos fabricar eléctricos en España pero también venderlos aquí”, ha apuntado Griffiths, que incluso se ha referido a objetivos específicos, como duplicar las ventas de eléctricos y triplicar el tamaño de la red de recarga.

Optimismo

En esta línea se sitúa el memorándum de entendimiento anunciado la pasada semana por Seat y Volkswagen con Iberdrola. El fabricante asegura contar con otros “grandes socios, como Caixabank y Ficosa. Tenemos la base pero no podemos transformar en solitario el sector. Necesitamos el apoyo del Gobierno”.

Sin él, el proyecto de Seat para que España lidere su estrategia de electrificación se vendría abajo y obligaría a la firma a elegir otro mercado. Sin embargo, Griffiths ha asegurado ser optimista, con la base de las conversaciones que, hasta la fecha, ha mantenido con el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Además, el presidente de Seat también ha recordado que es preciso igualmente el apoyo de Bruselas para que dé su visto bueno a la instalación de las plantas de baterías.

Negociaciones

En este plano, Seat mantiene negociaciones con potenciales socios para el desarrollo de las plantas de baterías (celdas y ensamblajes), de las que Griffiths no ha dado detalles, aunque se ha comprometido a anunciar el resultado definitivo.

El futuro de Seat en Barcelona pasa por ese nuevo modelo de coche eléctrico urbano, del que la compañía no ha dado excesivos detalles, salvo que tendrá unas dimensiones similares a las del actual modelo Arona. El objetivo sería la fabricación de más de 500.000 unidades al año, también dirigidas al mercado español.

Números rojos en 2020

La pandemia truncó en 2020 una racha de cinco años consecutivos de crecimiento en los resultados de Seat, que cerró el ejercicio con pérdidas de 194 millones de euros. Según ha detallado el vicepresidente ejecutivo de Finanzas, Carsten Isensee, el volumen de ventas mundial cayó un 21%.

No obstante, el responsable financiero de la compañía valoró el hecho de que Seat lograra un resultado bruto de explotación (Ebitda) positivo, de 157 millones de euros, y que Seat volviera a superar (por tercer año consecutivo) la cifra de 1.000 millones de euros en inversión.