Imagen de archivo de Alicia Koplowitz, propietaria de una de las sicavs más importantes del país / EP

Imagen de archivo de Alicia Koplowitz, propietaria de una de las sicavs más importantes del país / EP

Business

El Covid-19 da un mordisco de 400 millones a las grandes sicavs españolas

El valor de los activos de las grandes sociedades de inversión de los ricos se ha reducido cerca de un 12% en lo que va de año debido a la incidencia de la pandemia en los mercados

11 agosto, 2020 00:00

La crisis del coronavirus también ha golpeado en la línea de flotación de uno de los vehículos predilectos de las grandes fortunas para canalizar parte de su patrimonio: las sicav. En la primera mitad del año, las consecuencias de la pandemia en los mercados se han llevado por delante más de 400 millones de euros de las carteras de las principales sociedades de este tipo registradas en España.

Las diez mayores sicav del mercado cerraron el primer semestre del año con carteras valoradas en algo más de 3.200 millones de euros, cerca de un 12% menos que a finales de 2019. Una de las más afectadas ha sido Torrenova, controlada por la familia March, y que debido al efecto de la crisis del Covid-19 ha dejado de ser la única sicav cuyo patrimonio bajo gestión supera los 1.000 millones de euros.

 

 

Frenando Simón durante la rueda de prensa / EP

Impacto atemperado

Otras grandes fortunas que han padecido los efectos de la pandemia en sus sicav han sido Alicia Koplowitz, con su ya mítica Morinvest, la familia Del Pino, que tiene dos de sus sociedades entre las diez mayores, así como los Hernández Calleja, accionistas de referencia de Ebro Foods, y los Gallardo, propietarios de Almirall.

El impacto ha sido relativamente moderado si se tienen en cuenta las notables pérdidas que todavía acumulan los principales mercados de renta variable, la mayoría de los cuales están aún lejos de recuperarse de aquellas cuatro semanas desde mediados de febrero, que dibujaron la peor racha negativa de las bolsas en toda su historia.

El refuerzo de los bonos

El motivo es que en la mayoría de los casos de estas sociedades, gran parte de sus carteras están compuestas por valores de renta fija, en los que el impacto de la crisis ha sido menor gracias a la rápida y firme intervención de los bancos centrales para evitar que la expansión del coronavirus derivara en una nueva crisis de liquidez como la que se registró a finales de la pasada década.

Precisamente, Torrenova es un claro ejemplo. Prácticamente dos tercios de su cartera se corresponden con inversiones en renta fija que, además, se han incrementado en los últimos trimestres, en los que la sociedad ha reforzado su posición en bonos españoles, fortalecidos por el gran programa de compra de renta fija puesto en marcha por el Banco Central Europeo.

Valores reforzados

En el extremo opuesto se encuentra Morinvest. Las sicav de Alicia Koplowitz apuesta claramente por la renta variable, aunque la mayor parte de su cartera se corresponde con títulos que cotizan en los mercados internacionales.

No obstante, sus últimos movimientos en bolsa han guardado relación directa con el Ibex 35. De hecho, Morinvest ha hecho pequeñas apuestas por valores que no solo han esquivado las caídas generalizadas provocadas por el Covid-19, sino que además se han visto reforzados. Ha sido el caso de la farmacéutica Grifols y de la tecnológica Cellnex. En cambio, la sociedad de la empresaria ha deshecho posiciones en Aena, uno de los valores más castigados del selectivo español debido al fuerte impacto de la crisis en el turismo.

Industria y energía

En el caso de Allocation, la mayor sicav de las controladas por la familia Del Pino --primer accionista de Ferrovial--, la reacción ha consistido en reforzar posiciones en renta variable, en acciones relacionadas con los sectores industrial y energético; en renta fija, la sociedad también ha aumentado su exposición, tanto a bonos soberanos como a renta fija corporativa.

Una estrategia muy similar en bolsa ha seguido Soixa, la gran sicav de la familia Hernández Calleja, cuyo patrimonio ha pasado de bordear los 300 millones de euros a situarse por debajo de los 250 millones con motivo de la crisis. El refuerzo en renta variable llega sobre todo de sectores industriales, en busca de una cierta estabilidad en la evolución de la cartera.

Supervivencia de las sicavs

Las sicav permanecen como uno de los vehículos predilectos de las grandes fortunas para canalizar parte de sus ahorros debido a los estímulos fiscales que presentan. Sin embargo, un buen número de grandes patrimonios ha liquidado las suyas o bien las ha transformado en otro tipo de sociedades de inversión (e incluso en mercantiles convencionales) en los últimos años debido, entre otros factores, a las amenazas que han llegado desde el ámbito político sobre posibles modificaciones de su régimen.

El paso dado en su día por Amancio Ortega, que cerró las dos sociedades en las que había invertido parte de los ingresos que obtuvo por la salida a bolsa de Inditex, en el año 2001, fue seguido por, entre otros, la familia Escarrer, propietaria de la cadena hotelera cotizada Meliá; los hermanos Andic, fundadores y dueños de Mango; los Fernández Somoza, dueños de Transportes Azkar; y también por la propia familia de Ortega, entre ellos su hermana Josefa y su sobrina Dolores Ortega, que optaron por el cambio de naturaleza de la sociedad de inversión.