Las empresas mejoran las expectativas de exportación. Muelles de contenedores del puerto de Bilbao / EFE

Las empresas mejoran las expectativas de exportación. Muelles de contenedores del puerto de Bilbao / EFE

Business

Las empresas mejoran las expectativas de exportación en el cuarto trimestre de 2016

Las proyecciones de ventas exteriores aumentan en 4,7 puntos en el tercer trimestre de 2016, según el Minsiterio de Economía

24 enero, 2017 11:42

Las empresas han mejorado sus expectativas de exportación a finales de 2016. La previsión de ventas exteriores ha aumentado en 4,7 puntos sobre el tercer trimestre, hasta situarse en +21,1 puntos, según el Indicador Sintético de Actividad Exportadora (ISAE).

El indicador también ha subido ligeramente respecto al mismo trimestre de 2015 (20,9 puntos), según la Encuesta de Coyuntura de la Exportación, que ha publicado el Ministerio de Economía. Este indicador puede oscilar entre -100 y +100. Los valores positivos indican una mejor percepción de la actividad exportadora y/o de las previsiones.

Termómetro de exportaciones

El Ministerio recoge la información proporcionada por las empresas entrevistadas sobre la evolución de su cartera de pedidos de exportación en el trimestre de referencia y las perspectivas a tres y doce meses. El ISAE es un indicador balance, es decir, se construye por la diferencia entre las empresas que prevén evolución al alza y las que lo hacen a la baja.

En este caso, el ISAE da un resultado de 15,4 para el trimestre actual (8,2 en el tercer trimestre); de 23,7 para las perspectivas a tres meses (24 puntos en el tercer trimestre); y 38,8 para 12 meses (36,1 en el tercer trimestre). Por tanto, mejoran las perspectivas del trimestre actual y la previsión a 12 meses y empeora ligeramente para tres meses.

El por qué del optimismo

El principal motivo de este optimismo es la evolución de la demanda externa, según los empresarios encuestados. También influyen favorablemente que la consideración de que disponen de los recursos humanos adecuados y de productos de suficiente calidad como para ser competitivos a escala internacional.

En cambio, la influencia negativa puede provenir de la competencia internacional en precios, el precio de las materias primas y el precio del petróleo.