La justicia ‘tumba’ el plan de Amancio López de quedarse con dos hoteles de Joan Gaspart
El Juez de lo Mercantil considera que la oferta que presentó Hotusa por dos establecimientos en la Vall d’Aran no cubre las necesidades económicas de la liquidación
1 diciembre, 2016 00:00Amancio López-Seijas, propietario del grupo hotelero Hotusa, no podrá aplicar su particular vendetta a un viejo rival del sector en Cataluña, el dueño de la cadena Husa, Joan Gaspart. El Juzgado Mercantil 3 de Barcelona ha desestimado la oferta que el empresario de origen gallego presentó a principios de mes para hacerse con dos hoteles de la Vall d’Aran que eran propiedad del también expresidente del FC Barcelona y la Unió Esportiva Sant Andreu al considerar que no cumple los requisitos mínimos del proceso de subasta.
Se trata de los últimos coletazos del concurso de acreedores de la hotelera de Gaspart. Husa pasó página a la quiebra a principios de octubre mediante un pacto con el fondo británico Park Street Advisors en el que le cedía el 60% de la propiedad a cambio de que los acreedores aceptaran una quita del 95% en los 250 millones de euros de pasivo. Pero los activos de Solsibu, la holding de los dos establecimientos del Pirineo catalán, se quedaron al margen de la operación.
Hotel Tuca y Orri de Vall d’Aran
El grupo de López-Seijas fue el único que pujó en la venta al mejor postor que se abrió en el tribunal catalán para buscar nuevos propietarios para los hoteles Tuca, situado en la localidad de Betrén (en los alrededores de Vielha, la capital aranesa) y Orri, que se encuentra en la carretera de Tredós, al lado de las pistas de esquí más pijas de España, las de Baqueira Beret.
Ambos establecimientos se inauguraron en los años 80 del siglo pasado con pompa y circunstancia y en la temporada de invierno, momento álgido del turismo en la zona, colgaban el cartel de completo. Pero para recuperar el brillo de antaño se necesita una inversión que, de entrada, Hotusa no pretendía realizar.
La oferta que se considera insuficiente
En la apertura de plicas del proceso de liquidación puso sobre la mesa 2,5 millones, lejos de los 5 que la administración concursal fijó como precio mínimo en el plan de venta. También fue duro con la continuidad de la plantilla. De los 25 trabajadores fijos que estaban afectados por el concurso sólo dio continuidad a 17 personas ante la perplejidad de los sindicatos que seguían el proceso.
Se revisó al alza las características tras un receso decretado con este fin el día de la vista, pero no se alcanzó el mínimo que el tribunal y la administración concursal ejercida por el letrado de Mazars José Manuel Calavia y el economista de Roca Junyent Josep Pujolràs consideraron que era adecuado.
Repetición del proceso
Ahora, se repetirá el proceso de venta de los dos hoteles como una única unidad productiva. López-Seijas podría hacerse con los establecimientos sin necesidad de revisar de nuevo al alza su oferta, ya que el tribunal ha dictaminado que en la segunda vuelta no se aplicará ningún criterio mínimo ni en materia de precio ni en el número de trabajadores que debe subrogar.
Los interesados disponen de semanas para hacer llegar su oferta el Juzgado Mercantil 3 de Barcelona.