Trabajador extranjero en plena actividad / EP

Trabajador extranjero en plena actividad / EP

Vida

Cataluña pierde trabajadores extranjeros por la pandemia

El número de empleados internacionales con alta en la Seguridad Social ha caído un 4%

19 noviembre, 2020 19:59

El total de trabajadores extranjeros en Cataluña se situó en los 500.402 en octubre, cifra que representa una pérdida del 4% respecto a las mismas fechas de hace un año. Solo en el último mes, se ha registrado una caída del 1,2%, según datos del Ministerio de Seguridad Social y Migraciones.

En toda España, el descenso no ha sido tan pronunciado: hay 2.074.538 empleados internacionales, un 0,2% menos que en el mes anterior. En este periodo se han perdido 3.663 afiliados extranjeros, hecho que rompe una racha de cinco meses de crecimiento.

Rumanía, en cabeza

De los más de dos millones de migrantes en alta, los más numerosos son los de nacionalidad rumana (328.212), marroquí (256.469), italiana (123.824) y china (98.716). La mayoría (64%) es de fuera de la Unión Europea, y el 36% restante procede de países comunitarios.

España ha recuperado 101.986 afiliados internacionales desde abril, en el que se registró el punto más bajo coincidiendo con el momento álgido de la pandemia. Sin embargo, los datos aún quedan por debajo de los dos picos históricos que hubo en mayo de 2008 (2.145.901 trabajadores) y en junio de 2019 (2.178.269).

 

Retorno de migrantes

Dentro de esta tendencia de destrucción de empleo migrante hay dos grupos con circunstancias diferenciadas. El primero es el de empleados procedentes de otros países europeos que ven en España un país atractivo para trabajar, pero no en plena crisis del Covid. Según Pablo Díaz, profesor de Economía y Turismo de la UOC, estas personas “ven la situación, teniendo en cuenta las restricciones que hay aquí, y habrán vuelto. Hablo de alemanes, nórdicos, del centro de Europa, Reino Unido…”

Una situación muy distinta a la de los trabajadores migrados menos cualificados que se ven afectados por la crisis económica y laboral. “Hay inmigrantes de sectores más primarios, gente de la construcción… que ven que no hay trabajo y han vuelto”, explica Díaz.

Fronteras más gruesas

Según el economista, las medidas adoptadas en todo el mundo para frenar el virus son el principal factor detrás de un parón en la movilidad internacional que ha afectado tanto al mercado laboral como al turismo. En este aspecto, considera que la situación podría revertirse en los próximos meses: “Empieza a haber cierto optimismo de que quizás esta primavera se empieza a arreglar”, asegura. Díaz destaca que “con las vacunas, se espera que haya una recuperación el año que viene”, un elemento que se añadirá a la mejora del clima pasado el invierno. Los mercados parecen coincidir con este presagio: “En la bolsa ya se ha visto algo: las empresas de viajes han subido un 20-30% en el último mes”.