De izq. a dcha., la periodista Aurora Masip junto a Manel del Castillo, presidente del Cairos y gerente del Hospital del Sant Joan de Déu, Elvira Bisbe, presidenta del Col·legi Oficial de Metges de Barcelona, y Josep Maria Via, exdirector del Institut Català de la Salut (ICS) y del CatSalut, durante la celebración de 'Els Diàlegs' de la Fundació Barcelona 1989

De izq. a dcha., la periodista Aurora Masip junto a Manel del Castillo, presidente del Cairos y gerente del Hospital del Sant Joan de Déu, Elvira Bisbe, presidenta del Col·legi Oficial de Metges de Barcelona, y Josep Maria Via, exdirector del Institut Català de la Salut (ICS) y del CatSalut, durante la celebración de 'Els Diàlegs' de la Fundació Barcelona 1989 Fundació Barcelona 1989 Barcelona

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Del Castillo, contra el "monstruo burocrático" para salvar la operatividad del sistema sanitario catalán

El presidente de Cairos señala la explosión demográfica y la implementación de IA como los retos en Salud

Más información: Retos de Cataluña para el "hospital virtual" del futuro: digitalizar y garantizar el cuidado en el hogar

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El sistema sanitario catalán tiene grandes retos por delante, dos en concreto, a juicio de Manel del Castillo, presidente del Cairos y gerente del Hospital del Sant Joan de Déu, como son "la bomba demográfica y la bomba de innovación", apaleadas por la ingente burocracia a la que se enfrenta cada día el servicio.

Así lo plantea la mano derecha de la consellera de Salud, Olga Pané, y uno de los ideólogos principales de la reforma de la atención primaria y los hospitales de Cataluña. "A pesar de todo, el sistema sanitario tiene gran fortaleza, pero tenemos un problema organizativo", aseveró ante la audiencia del acto Els diàlegs, de la Fundació Barcelona 1989. 

Ineficiencia

Un encuentro que se dio este martes en la Sala Oriol Bohigas, de l’Ateneu Barcelonès, donde se contó con la presencia de Elvira Bisbe, presidenta del Col·legi Oficial de Metges de Barcelona, y Josep Maria Via, exdirector del Institut Català de la Salut (ICS) y del CatSalut. 

El preámbulo al debate reflejaba el tono de la charla. Una voz en off repasaba los hitos de la sanidad catalana, desde la concesión de la competencia y la vertebración de fundaciones e instituciones que dieron atención a la ciudadanía mediante conciertos ante la falta de infraestructuras públicas, hasta el equilibrio de un ecosistema que, hoy día, a pesar de las fallas del tiempo, continúa siendo referente para el paciente. 

"Infrafinanciación", "ineficiencia", "antítesis", fueron algunos de los adjetivos con los que se calificó el funcionamiento actual. Y, pese a estas ofensivas, Castillo apuntó que el servicio público continúa siendo "lo mejor" para la ciudadanía gracias a la resolución de las cuestiones complejas, ya sea la cronicidad o las enfermedades agudas, pese a que las listas de espera no dejan de engrosarse. 

Gestión

Ahora bien, Castillo hizo hincapié en la diferencia entre administración pública y gestión pública: "Una cosa es la administración, orientada a la seguridad jurídica y a la norma, y otra es la gestión, que puede ser directa o indirecta [a través de conciertos o instituciones]. Es más, somos una anomalía en el mundo europeo, con hospitales del ICS que no tienen personalidad jurídica teniendo presupuestos de 1.000 millones". 

Una visión que el guardián del Cairos ve "difícil" trasladársela a la ciudadanía. Con la puesta en marcha de los Centros de Salud Integral de Referencia (CSIR), esta visión tiene la oportunidad de cristalizarse en medidas concretas y construir un puente de confianza entre ambas partes.

Por ejemplo, la rebaja en la valoración del nivel de dependencia es un expediente administrativo: de media, se tarda un año y medio, pero "nosotros hemos analizado este tema y en el CSIR lo hemos hecho en dos meses". A pesar del cálculo, ve que "hay un monstruo burocrático basado en la desconfianza y el control" que impide la estandarización total. Por tanto, primero se apoyarán en las evaluaciones que harán dentro de un año para escalarlo al resto del sistema.

Cabe recordar que Cairos presentó a principios de verano el primer plan de choque para la actualización de los centros de primaria y, en noviembre, inició la segunda parte del programa con relación a los hospitales. Una planificación que se sustenta en diez puntos claves, fruto del análisis de los informes que se habían realizado hasta la fecha, y que buscan la máxima eficiencia: "Más gestión que administración, más compra por valor que por actividad, más digitalización y no solo informatización".

Frente a la proliferación

Por su parte, y con un tono rotundo, Josep Maria Via dio tres claves para "recuperar" el sistema sanitario: convertir la sanidad en una cuestión de Estado que esquive las discusiones y tretas partidistas con las que se polariza un debate sobre una cuestión fundamental para el cuidado de la población; así como la mejora de su financiación singular, pese a su escepticismo con respecto al sistema de autonomías.

En referencia al tercer punto, fue mucho más beligerante: "Hay que parar la proliferación de empresas públicas, públicas y consorcios, hechas de la manera en que se ha hecho hasta ahora", aseveró ante la sistematización de los recursos. "Si nos referimos al ICS, adelante, sobre todo cuando ayudan a su modernización, pero no tal y como se ha hecho en la práctica", subrayó ante el público del Ateneu.

Un asunto que vendría acompañado de una interpretación más ágil y menos rígida de la normativa que envuelve al aparato sanitario, ya que "falta autonomía, gobernanza y gestión" a la hora de afrontar los retos del servicio. Si bien apoya la gestión de la conselleria, con cuya líder estuvo mano a mano durante su etapa en el Hospital Clínic, ve una "parafernalia normativa" en el funcionamiento de los órganos de gestión de hospitales e instituciones que operan en el territorio catalán. 

Falta de planificación

Bisbe, atenta a sus interlocutores, coincidió con ellos en varios puntos, mayormente en lo referente a la administración, que se convierte en una "sensación de corsé" que afecta también a los trabajadores y les genera "insatisfacción". Con datos, señaló que el 30% del tiempo de atención en la primaria "es burocracia" con la que tienen que lidiar, a pesar de que sean trámites menores como las incapacidades temporales (IT).

En cualquier caso, incidió en la falta de planificación dentro de la gestión política. "En los últimos 20 años no ha habido un plan adecuado, se han jubilado 5.000 médicos y, en el punto álgido, serán 1.300 especialistas en Barcelona", mencionó con relación al retiro de la generación babyboom, una de las grandes preocupaciones de la administración pública. "Aumenta la complejidad, aumenta la demanda, aumenta el envejecimiento de la población, pero no se ha hecho una planificación de acuerdo con la necesidad", insistió. 

El sistema tira mano de los facultativos extracomunitarios. Es más, el informe del Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña (CCMC) resaltó que en 2024 el 56% de los colegiados eran extracomunitarios, generalmente procedentes de Sudamérica. "Si no vinieran, tendríamos que cerrar muchos dispositivos", aseguró. Impedir su entrada en las plantillas catalanas no es la solución, adujo contra las tesis de extrema derecha, sino la falta de un replanteamiento que se pregunte por qué los estudiantes de otras autonomías, finalmente, no se quedan en la región.

"Vivir aquí es mucho más caro que en Logroño u otros lugares", mencionó, "y al final descapitalizamos, porque pagamos formación, tenemos necesidades sanitarias y, de repente, nos quedamos con que un 40% vuelven a casa y luego lo debemos importar", criticó. Hacer atractivo el sistema, tanto dando complementos económicos como agilizar los trámites a los que se enfrenta en las consultas y, sobre todo, "planificar" para ajustar la respuesta a los próximos nuevos 40 años vista.