Arranca la gran reforma de la atención primaria en Cataluña con los 27 nuevos 'superambulatorios'

Cataluña inicia la primera gran reforma de la atención primaria después de 30 años con la puesta en marcha a partir de este 1 de julio de los nuevos 27 Centros de Salud Integral de Referencia (CSIR), una adaptación de los Centros de Atención Primaria (CAP) con inteligencia artificial, incorporación de nuevos perfiles profesionales y una respuesta transversal a la comunidad.

El Govern ha aprobado en el Consell Executiu de este martes un acuerdo para autorizar las 25 medidas que se desplegarán a partir de ahora y cuyos resultados se evaluarán dentro de un año para decidir si se escala a toda Cataluña. Esta será la primera fase para la reforma del sistema, en la que se aplicarán los siguientes principios: más autonomía, más comunidad y más integración. 

Imagen del CIS Cotxeres de Barcelona, donde hay atención primaria Cedida

"Toca hacer las cosas de forma diferente"

A lo largo del mes de julio, se realizarán los acuerdos de adscripción al Servicio Catalán de Salud (CatSalut) de los 27 CSIR. No habrá una dotación económica específica, explica Pilar Otermin, subdirectora del CatSalut, sino que se reajustará la financiación de cada centro según sus necesidades para la incorporación de servicios o de plantilla. 

"La sociedad ha cambiado después de más de 30 años con el mismo modelos, así que toca hacer las cosas de forma diferente, porque la sociedad y los profesionales tienen nuevas necesidades", ha afirmado Otermin durante una rueda de prensa organizada esta mañana en la sede de la Conselleria de Salud, previa al Acuerdo de Govern.

Los dos principios básicos de esta reforma serán, a un lado, la mayor autonomía organizativa y de gestión de los CSIR y, al otro, mejorar la atención fuera de los propios centros sanitarios, con la implicación de los trabajadores comunitarios. Con ello, se pretende afrontar los grandes retos del sistema de salud, como el envejecimiento de la población, el aumento de la cronicidad o la sobrecarga de los profesionales.  

Salud lanza un plan para reducir los ingresos hospitalarios de unas 300.000 personas frágiles en Cataluña

Nuevos perfiles: los administrativos

Entre las novedades que incorporarán los CSIR, habrá más inteligencia artificial, se hará un reconocimiento retributivo a los profesionales según el cumplimiento de objetivos, y se incorporarán nuevos perfiles, como los administrativos para agilizar los trámites y disminuir la burocracia a la que se enfrentan cada día los facultativos o la incorporación de terapeutas ocupaciones.

La cuestión es "reformar el sistema sin poner en cuestión sus pilares", ha dicho Manel del Castillo, presidente del Comité de Evaluación CAIROS. Asimismo, el propósito es confiar en el criterio de los profesionales sanitarios y, al mismo tiempo, recuperar la confianza de los pacientes en la asistencia, ha indicado.

Con el criterio de las 4C —conocimiento, confianza, constancia y continuidad—, espera que los cambios, que se realizarán de forma gradual, impacten en positivo en la sociedad. "No hay falta de recursos, pero sí de una organización manifiestamente mejorable", ha aseverado, "no será una solución mágica, pero todo esto puede mejorar la accesibilidad a la atención primaria". 

Premiar la productividad

Para ello, ha explicado que los indicadores a tener en cuenta y que serán analizados de forma trimestral serán, con relación a los pacientes, la accesibilidad en primaria y a las consultas hospitalarias, el apoyo sanitario en las residencias, la gestión de la dependencia y la satisfacción que sienten a la hora de recibir todos estos cuidados.

Por parte de los sanitarios, se examinará la productividad, a partir de los ratios de pacientes por médico, además de la gestión de los medicamentos, la orientación a resultados y, también, la satisfacción de los profesionales. Los cambios organizativos, tal y como ha detallado Castillo, serán "pequeños" pero con un gran impacto en la dinámica de la atención primaria.

Por ejemplo, ha comentado, mejorar la ayuda domiciliaria en colaboración con los ayuntamientos para evitar el reingreso en los centros hospitalarios de los pacientes y, en otro caso, atender las bajas médicas desde un punto de vista preventivo con el auxilio de fisioterapeutas o psicólogos. 

Con respecto al compromiso de las 48 horas de acceso a la atención primaria y a la consultas médicas que aseguró la Conselleria en un primer momento de la legislatura, Castillo se muestra prudente e indica que podrá cumplirse en ciertos ámbitos donde "la accesibilidad será mucho mejor". En todo caso, esperan a la evaluación de este primer año para examinar los resultados y aplicarlo de forma general.

Salud multará las agresiones físicas y verbales hacia los sanitarios: "Es una medida de protección"

Distribución territorial de los 27 CSIR

Los nuevos 27 CSIR estarán distribuidos por diferentes áreas. En Alt Pirineu i Aran, será el Tremp. En Barcelona Ciutat serán los equipos de Comte Borrell, Encats, Barcelona 7B y ETAP Clot-Sant Martí. En cuanto al área Metropoiltana Nord, estarían incluidos Barri Llatí - Santa Coloma de Gramenet, Sabadell 4A CAP Concòrdia, Ronda Prim - Mataró y Sant Llàtzer - Terrassa.

En Tarragona, se adaptarán el Mont-Roig del Camp y el Reus V. Además, en Catalunya Central estarán dentro de la red Barri Antic - Manresa, Santa Eugènia de Berga, Vic Nord y Vic Sud. Con respecto a Girona, serían el Salt, Canet de Mar y Calella.

Desde Lleida, los nuevos CSIR estarían el Onze de Setembre. Luego, en el Penedès, serían Baix-a-Mar, Penedès Rural Est - Vilafranca del Penedès y Baix Penedès Interior - L'Arboç. A su vez, en Terres de l'Ebre, los pacientes podrán ver estas reformas en el L'Ametlla de Mar - El Perelló.

A continuación, pueden consultar los CSIR que estarán distribuidos por el territorio:

Expectativas de los profesionales

Miquel Prats, administrativo de atención a la ciudadanía del CSIR Comte Borrel de Barcelona, fue uno de los participantes en este encuentro, quien ha expresado que esta reforma "ilusiona mucho a los profesionales y esperamos que esto lo podamos transmitir a los usuarios".

La necesidad de un cambio se manifestaba tanto dentro como fuera de las consultas, ha comentado, sin embargo, la inercia del día a día parecía que impedía un cambio profundo. La sensación era, ha asegurado, "que se estaban malgastando recursos". No desde un punto de vista económico, sino de capacidad y mejora del sistema. "Pero las circunstancias lo impedían", ha continuado.

La incorporación de su centro a esta primera fase le da de un nuevo papel profesional. Se requerirá tiempo y mucha pedagogía para explicar a los usuarios cuál será su función y la confianza por parte de los facultativos, ha reflexionado, pero ha asegurado que su función "en los próximos años será clave". "Debemos ayudar a desburocratizar las consultas", ha demandado, con el horizonte de trabajar de forma "más ágil y rápida" y con los recursos adecuados.