Momento del robo en un portal del barrio de Can Serra de L'Hospitalet de Llobregat

Momento del robo en un portal del barrio de Can Serra de L'Hospitalet de Llobregat Crónica Global

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Una sudadera, un mordisco y un cambio de ropa: así cayó un multirreincidente en L’Hospitalet

El testimonio de un barrendero fue clave para localizar al joven que acababa de perpetrar un robo con violencia a una anciana en el barrio de Can Serra

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Eran poco más de las doce del mediodía cuando una vecina de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), cargada con bolsas de la compra, se detuvo frente al portal de su edificio, en el barrio de Can Serra.

Mientras rebuscaba en su bolso para encontrar las llaves y entrar, un hombre se le acercó por detrás con paso rápido y sigiloso. Llevaba sudadera roja y una gorra que ocultaba parcialmente su rostro.

Aprovechando el momento de distracción, el individuo la sujetó por el cuello con un solo objetivo: arrancarle la cadena de oro que llevaba colgada. La víctima, sin embargo, no se dejó intimidar. Aunque sorprendida, reaccionó con firmeza, forcejeó con su agresor e incluso logró morderle la mano

La escena fue breve, pero intensa. La mujer cayó al suelo durante el forcejeo y el ladrón huyó finalmente con la cadena.

Según las imágenes a las que ha tenido acceso Crónica Global, la víctima quedó sentada en el suelo, visiblemente afectada por lo sucedido. Aún así, tuvo la entereza de llamar al 112 y explicar lo ocurrido. Los Mossos d’Esquadra recibieron la alerta pocos minutos después y activaron varias patrullas para iniciar la búsqueda del agresor.

Un testigo inesperado 

El giro clave en la investigación llegó gracias a un testigo inesperado: un barrendero de limpieza urbana que se encontraba en la zona. El trabajador observó cómo un hombre, con actitud nerviosa, se quitaba una sudadera roja para guardarla en su mochila y se colocaba una azul. El detalle no pasó desapercibido.

"Es una técnica habitual entre ladrones: cambian de ropa tras el delito para evitar ser reconocidos por las descripciones de los testigos", explican fuentes policiales.

Cuando vio a los agentes patrullando por la zona, el barrendero les informó de lo que acababa de presenciar. Los agentes, que ya se habían cruzado momentos antes con un joven que vestía una sudadera azul, ataron cabos rápidamente y regresaron sobre sus pasos. En poco tiempo, localizaron al sospechoso y lo interceptaron.

La pista clave: el mordisco

Durante el registro, encontraron en su mochila la sudadera roja que coincidía con la descripción de la víctima. Pero hubo un detalle que terminó de confirmar su implicación: una marca visible de un mordisco reciente en una de sus manos, el mismo que la mujer dijo haberle propinado durante el forcejeo.

No obstante, no se halló la cadena robada. "Lo más probable es que se la entregara a un cómplice para evitar ser descubierto con ella", apuntan los investigadores.

Imagen de archivo de un agente pidiendo la identificación a un sospechoso

Imagen de archivo de un agente pidiendo la identificación a un sospechoso SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

El detenido, conocido por su historial delictivo, fue puesto a disposición judicial e ingresó en prisión preventiva. Se trata de un multirreincidente, el perfil por excelencia en los casos de hurtos y robos con violencia que se producen en el área metropolitana de Barcelona.

Plan contra la multirreincidencia

La situación pone de relieve la necesidad de herramientas más eficaces para combatir este tipo de delincuencia. En esa línea, los Mossos d’Esquadra han activado recientemente el 'plan Kanpai', una estrategia transversal para abordar la multirreincidencia desde distintos frentes: policial, judicial, social y comunicativo.

Este plan, además, también contempla una mayor presencia en la calle de unidades especializadas como la Brigada Móvil (BRIMO) y el Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), dos unidades antidisturbios, no sólo en tareas operativas, sino también en labores de análisis y prevención.

Con este tipo de actuaciones coordinadas, las autoridades buscan reducir la reincidencia en los delitos contra el patrimonio y mejorar la seguridad en los barrios. Y es que casos como el de esta vecina de L'Hospitalet evidencian la necesidad de perseguir a un perfil de delincuente que parece sentirse impune.