Los Mossos de la calle Bolivia trabajarán en barracones mientras duren las obras de la comisaría de Sant Martí
- El edificio provisional se está habilitando a escasos 150 metros de donde se ubica el complejo policial actual, en el espacio que cumple la función de aparcamiento
- Otras historias: Los Mossos también renuevan su servicio de traducción: una respuesta ante el auge del crimen transnacional
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Los más de 200 agentes de los Mossos d'Esquadra que actualmente trabajan en la comisaría de la calle Bolivia de Barcelona, donde coexisten el Área Básica Policial (ABP) del distrito de Sant Martí con algunos de los servicios centrales y regionales, se ubicarán de forma temporal en módulos prefabricados, también conocidos como barracones.
Así lo harán mientras duren las obras de rehabilitación integral del conocido edificio BASE, la antigua sede central del cuerpo. Una reforma que cuenta con un presupuesto de casi 28 millones de euros (23 millones sin IVA) y que, en principio, estará terminada en 2027.
Barracones dentro del párking
Según han explicado fuentes policiales a Crónica Global, la comisaría provisional se está habilitando a escasos 150 metros de donde se ubica el complejo policial de la calle Bolivia: en el edificio que actualmente cumple la función de aparcamiento. Una nave industrial ubicada entre las calles Ávila y Badajoz del barrio del Poblenou.
De este modo, dentro del edificio donde se ubica el párking se está construyendo una gran infraestructura compuesta por los módulos provisionales que, próximamente, se convertirán en los despachos de la nueva comisaría de Sant Martí. Un espacio provisional mientras el edificio de la calle Bolivia vuelve a estar listo.
En estos momentos, la misión de los obreros es transformar el aparcamiento de la ABP en unas instalaciones dignas de acoger la comisaría del distrito y a sus 200 agentes, en principio hasta 2027.
No obstante, no todos los policías que actualmente tienen su despacho en el edificio que se demolerá próximamente se trasladarán a este espacio provisional. Este es el caso de todos aquellos funcionarios adscritos a unidades regionales o centrales, como la División de Escoltes, que depende directamente de la Jefatura de Mossos.
Los afectados deberán trasladar sus dependencias, al menos de forma provisional, a otras comisarías de la ciudad o al actual Complejo Central de Egara, sito entre Sabadell y Terrassa.
La licitación, viento en popa
En paralelo, la licitación pública para rehabilitación integral de la antigua comisaría conocida como la territorial, progresa adecuadamente. Tras el triple anuncio de concurso público del pasado julio (uno para la construcción, otro para el plan de seguridad y un tercero para la dirección ejecutiva de la reforma), ahora el proceso de contratación encara la fase de evaluación.
Hasta nueve empresas constructoras se han presentado al concurso para liderar la rehabilitación del complejo policial.
De este modo, la añorada reforma está un poco más cerca de ser una realidad. Una vez culmine el proceso de licitación, el histórico edificio de la calle Bolivia será demolido para dar paso a un nuevo complejo policial que cumpla las exigencias tecnológicas y estructurales de un cuerpo que se presenta como la policía del siglo XXI.
Futura base de la Región Policial
Con esta licitación, la Generalitat cierra una herida en el cuerpo de la policía catalana. La instalación, situada en un edificio construido en 1957, está visiblemente degradada y, desde hace años, los diferentes sindicatos policiales han alzado la voz contra la precariedad de las instalaciones policiales, sin que las reformas puntuales hayan servido para alcanzar un estado óptimo del edificio.
Según se extrae de los informes del concurso público, ahora en fase de evaluación, las obras contemplan la transformación del edificio industrial en un espacio moderno, con láminas de cerámica en el exterior, que protegerán del sol y darán intimidad a los trabajadores. A la reforma se le sumará la construcción de nueva planta de 1.000 metros cuadrados.
La Generalitat quiere que este equipamiento, además, se convierta en la base de la Región Policial de Barcelona, manteniendo la relevancia histórica de esta ubicación que, durante años, fue el edificio más importante del cuerpo.
Es por ello que en el edificio se instalarán los servicios y unidades propias de la Región Policial: los mandos policiales y los servicios administrativos; las unidades de coordinación de los dispositivos; el Área Regional de Seguridad de Edificios y Traslados; el Área de Investigación Criminal (AIC), y el Área Regional de Recursos Operativos (ARRO). Por supuesto, también seguirá albergando las instalaciones de la ABP del distrito de Sant Martí.