Cataluña se ha consolidado como uno de los destinos turísticos más importantes tanto a nivel nacional como internacional. Con sus impresionantes playas, montañas, ciudades vibrantes y una riqueza cultural inigualable, es una de las comunidades autónomas que más visitas recibe año tras año.
Según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), Cataluña es la comunidad autónoma que más turistas extranjeros ha recibido en los primeros siete meses del año hasta alcanzar los 11,46 millones, un 10,5 % más que un año antes, en un año de récord para toda España, con 53,37 millones de visitantes de fuera, un 12 % más.
Muchos piensan que el turismo en esta región se centra en la bulliciosa Barcelona y en las playas de la Costa Brava y la Costa Dorada, pero que se extiende a múltiples localidades que atraen a visitantes por sus encantos naturales, su patrimonio histórico y su oferta de ocio. La prueba de ello es que el pueblo más masificado a nivel turístico de la comunidad autónoma no aparece, curiosamente, en los rankings de los pueblos más visitados.
Es el caso de Salou y Naut Aran, dos localidades que, según datos recientes del portal de alquiler vacacional Holidu, se encuentran entre los municipios más masificados de toda España. Aunque Salou es un destino conocido por su turismo de sol y playa, lo sorprendente en esta lista de los más visitados es la presencia de Naut Aran, un pequeño pueblo pirenaico de menos de 2.000 habitantes conformado por varias aldeas.
Los dos pueblos más masificados de Cataluña
Con una ratio de 49,4 turistas por habitante, Naut Aran lidera la clasificación en la provincia de Lleida, y en toda Cataluña, mientras que Salou le sigue muy de cerca con 48,6 visitantes por residente. Este dato es particularmente significativo si se tiene en cuenta que Salou, con sus casi 27.000 habitantes, recibe más de 1.284.275 visitantes al año, mientras que el pueblo de Lleida, con apenas 1.921 residentes, acoge a unos 87.307 turistas en el mismo período. Eso hace que, a pesar de la diferencia en el número total de visitantes, Naut Aran se convierta en el pueblo con la mayor densidad turística.
La comparación entre estos dos destinos pone de manifiesto la diversidad de la oferta turística catalana. Salou es conocido por su ambiente vibrante, sus playas y su oferta de ocio nocturno, atrayendo principalmente a un público internacional en busca de sol y diversión. Por otro lado, Naut Aran cautiva a los amantes de la naturaleza y los deportes al aire libre, quienes encuentran en su entorno natural un escenario perfecto para el senderismo, el esquí y otras actividades de montaña.
Los atractivos de Naut Aran
A diferencia de Salou, Naut Aran es un pequeño rincón en la Vall d’Aran que se ha convertido, con una altitud de aproximadamente 1.268 metros, en un paraíso para los amantes de la montaña y la naturaleza. Salardú, como también se le conoce, se encuentra en un entorno privilegiado, rodeado por las majestuosas montañas de los Pirineos y muy cerca de la famosa estación de esquí Baqueira-Beret.
La historia y arquitectura de Salardú son otro de sus grandes atractivos. Sus casas de piedra, los tejados de pizarra y las estrechas calles empedradas conservan el encanto tradicional aranés. Además, la iglesia parroquial de Sant Andreu, una construcción románica que data de la época medieval, guarda en su interior el Cristo de Salardú, una valiosa talla románica que es un auténtico tesoro de la región. Este pueblo fue una fortaleza estratégica durante la Edad Media, y sus restos históricos aún se pueden explorar.
Qué hacer
A pesar de que es conocido por las pistas de esquí, es Naut Aran un destino muy atractivo tanto en invierno como en verano gracias a su oferta de actividades al aire libre. En la temporada invernal, la proximidad a Baqueira-Beret permite disfrutar del esquí y otros deportes de nieve.
Mientras que durante el verano, los senderos y rutas de montaña ofrecen un entorno perfecto para el senderismo y el ciclismo. Una de las actividades más destacadas es la Ultra Trail Naut Aran, una carrera de montaña que recorre los senderos y prados alpinos del Pirineo y es puntuable para el Ultra Trail Mont Blanc.
Además de las actividades deportivas, el pueblo también organiza una serie de eventos culturales y festivos que atraen a visitantes de todas partes. Entre ellos se destacan la feria ganadera de octubre, que celebra la tradición pastoril del Vall d'Aran.
El Salardú Country Rock Festival, un evento musical combina la esencia de la cultura de montaña con la música de raíz. Y destacar también las fiestas locales, como “Era Hèsta de Santa Creu” el 3 de mayo, una oportunidad perfecta para disfrutar del ambiente festivo y la tradición local.
El entorno de Naut Aran
Por último, el entorno de Naut Aran ofrece una serie de paisajes espectaculares y rutas que son un deleite para los excursionistas. Desde Salardú, es posible recorrer el camino real hasta Tredòs y Baqueira, o continuar hasta otros pueblos cercanos como Unha, Gessa y Arties. Los lagos de Colomers y la presa de Aiguamoix son solo algunos de los lugares más impresionantes que se pueden explorar en la región.
Para los que buscan un entorno más relajado, Salardú cuenta con varias opciones gastronómicas donde es posible disfrutar de la cocina típica aranesa. Platos como las carnes a la brasa y las recetas tradicionales se pueden degustar en los restaurantes locales, completando así una experiencia que combina naturaleza, deporte y cultura de una manera única.
Cómo llegar
Para llegar a Naut Aran en coche desde Barcelona, se recomienda tomar la autopista AP-2 en dirección a Lleida. Al llegar a esta ciudad, se debe continuar por la autovía A-2 hasta conectar con la carretera N-230 en dirección a Vielha. Una vez en la capital de la Vall d'Aran, se toma la carretera C-28 que lleva hacia Baqueira-Beret.
Naut Aran se encuentra a lo largo de esta ruta, aproximadamente a unos 10 kilómetros de Vielha, lo que permite un acceso directo y sencillo al municipio. Siempre y cuando las condiciones climatológicas sean idóneas. En invierno, siempre es recomendable llevar cadenas en el vehículo. El trayecto desde Barcelona suele ser de tres horas y media