España tiene un problema: la vivienda. Y el segundo: el paro. Ante esta situación hay una oferta que cuesta mucho rechazar. Se ofrece una casa gratis en un pueblo de la Costa Brava y un trabajo con un salario que ronda los 2.000. Una noticia que revoluciona el sector inmobiliario y el laboral. Pero hay mucho más.
Aquí no hay truco. No se trata de ir a vivir a un municipio abandonado o una casa en ruinas, ni de mantener una iglesia algo deteriorada en el medio de la nada. Se trata de un lugar costero, con una naturaleza increíble y con una arquitectura que recuerda a la Edad Media. Y todo a hora y media de Barcelona.
Dónde es el trabajo
Es muy difícil decir que no. Especialmente, si uno se encuentra sin trabajo. Las condiciones, a simple vista, parecen inmejorables. El salario ofrecido está muy por encima de la media española y el alojamiento va incluido. ¿Se puede pedir más? Sí. Y lo da.
Resolvamos dudas. El lugar en cuestión, según indica el portal de ofertas laborales Indeed, es ni más ni menos que Pals, uno de los pueblos más bonitos e idílicos de la Costa Brava y cuyas playas siempre aparecen entre las más destacadas de Cataluña.
Qué hay
El trabajo en cuestión es verdad que no está en primera línea de costa, igual que el alojamiento. El puesto en cuestión es el casco urbano de Pals, a cinco kilómetros del litoral, pero inmerso en un pueblo que conserva buena parte del entramado y la arquitectura medieval.
A eso se le añade el entorno. El municipio está situado la comarca del Baix Empordà y rodeado de unos arrozales que ofrecen un paisaje único. Eso sin contar, con el encanto de otros pueblos del alrededor, desde Begur hasta Torroella de Montgrí, pasando por Palau Sator y Fontanillas, entre otros.
“Restos de muralla, torres vigía (Ramonet, Xinel·lo, Rom...), garitas, aspilleras y hasta dos sepulturas antropomorfas”, son algunos de los atractivos que destaca la mismísima National Geographic cuando alaba a Pals. Quien también destaca algunas masías que se encuentran todavía dentro del municipio, originarias (aunque bien restauradas) de los siglos XVI y XVII. Inmuebles que no solo alojan tiendas y restaurantes, sino también sirve de viviendas actuales de algunos vecinos.
Pals es uno de los conjuntos medievales mejor conservados de toda la comunidad autónoma, resguardado por una muralla que se levantó entre los siglos XII-XIV. Destacan en estas calles históricas la Torre del Homenaje, de estilo románico; su Plaza Mayor (con algunos detalles del gótico) y su iglesia de base románica, ábside y nave gótica y pórtico barroco.
La oferta de trabajo
Pero antes de hablar de la zona, mejor ir a la oferta de trabajo y vivienda en cuestión. Se trata de una vacante de técnico de mantenimiento en un camping, por la que se ofrece un contrato indefinido a jornada completa, con un salario que oscila entre los 1.800 y los 2.100 euros mensuales, dependiendo de la experiencia del candidato seleccionado. La oferta, además, viene con la posibilidad de vivir en un entorno natural y tranquilo como es este camping en medio de la naturaleza de Pals.
Para optar a este puesto, los aspirantes deben cumplir una serie de requisitos esenciales que aseguren la adecuada ejecución de las tareas. El principal es tener al menos un año de experiencia en mantenimiento de hoteles, alojamientos turísticos o campings. Además, se valora positivamente contar con un título de Formación Profesional de Grado Superior en mantenimiento y servicios, lo que puede dar una ventaja competitiva en el proceso de selección.
Requisitos para el puesto
Otro de los puntos importantes es el dominio de idiomas: el español, catalán y francés son imprescindibles, dado el perfil internacional de los campistas que frecuentan este tipo de instalaciones. Además, se requieren conocimientos específicos en áreas como jardinería, electricidad, mantenimiento de piscinas, tratamiento de aguas e inspecciones técnicas.
Por último, el portal indica que los empleadores también van a tener en cuenta que la persona candidata cuente con el carnet de conducir B, ya que muchas de las tareas implican desplazamientos dentro del recinto.
Por si hay alguien que no conozca Pals y piense que puede ser un lugar inmundo, avisar que es todo lo contrario. Con un encanto completamente medieval, en Pals destaca Ca la Pruna, una imponente casa fortificada de estilo gótico y renacentista. A partir de ahí, se pueden observar los siguientes lugares, no exactamente en ese orden:
- Plaça Major: imponente casa fortificada de estilo gótico y renacentista situada fuera de las murallas.
- Torre de las Horas: edificio románico de 15 metros de altura que fue construida entre los siglos XI y XIII.
- Iglesia de Sant Pere: iglesia construida con las piedras del antiguo castillo con una fachada barroca con restos de un antiguo templo del siglo XII.
- Portal de la Vila: portal que da acceso al carrer Major, una de las calles más bonitas de Pals.
- Ermita de Pals: capilla ubicada en la Finca de Can Pi.
- Can Frailem: casa propiedad de la Fundació Vila Casas en la que hubo una antigua farmacia.
- Mirador de Josep Pla: situado en la parte más elevada del pueblo de Pals.
Una visita a las playas
Tras visitar con detenimiento el pueblo, otro de los reclamos de Pals es acercarse hasta su cercana playa y disfrutar de sus más de 2000 metros de longitud y fina arena de color dorado. Un espacio para residentes y turistas y donde conviven en armonía dos espacios: por un lado, un sector algo más urbanizado y donde se encuentran la mayor parte de los servicios de este arenal y, por otro, un rincón algo más virgen entre dunas y pinares y desde donde se pueden contemplar las Islas Medes.
Precisamente, estas últimas son la joya de la corona del entorno de l’Estartit. Un pequeño archipiélago, declarado Parque Natural Nacional Protegido y Reserva Marina, que es un destino privilegiado para aquellos que quieren practica buceo y admirar las maravillas que esconde este fondo marino repleto de un ecosistema natural de lo más variado y rico.
Naturaleza viva
Si bello es Pals, también lo es todo el entorno natural sobre el que se asienta este pueblo medieval. Es la zona conocida como las Basses d'en Coll, un ecosistema en forma de dos balsas que se crean en la desembocadura del arroyo del Molino, adonde llegan las aguas de los arrozales que se cultivan en los alrededores de Pals. Un espacio natural que forma parte de la reserva natural parcial de los humedales del Baix Ter, en el Parque Natural de Montgrí, les Illes Medes y el Baix Ter.
Un rincón que seguro que no olvidarán tanto los amantes de la naturaleza, ya que en este enclave hay una amplia variedad de ejemplares vegetales como son la sauceda y olmeda, zarzas, cañaverales y carrizales; como los que prefieran hacer el avistamiento de aves. Las Basses d'en Coll es un punto importante para la cría de pájaros, así como para observar más especies en una fauna donde no faltan anfibios e invertebrados de todo tipo.
Cómo llegar
Desde Barcelona y en transporte privado, el pueblo se sitúa a tan solo una hora y media por la AP-7. Por proximidad, desde Girona, son solo 49 minutos y se llega a través de la C-66. Para estacionar hay muchas zonas libres de aparcamiento y no hay excesivos problemas para aparcar.
Como pasa con la mayoría de municipios de la Costa Brava, el acceso con transporte público es complicado. No llega el tren, la única vía es en autobús