En el mes de mayo, agentes de la Policía Nacional, los Mossos d'Esquadra, la Policía Local de Lloret de Mar, junto con efectivos de Inspección de Trabajo, precintaron el conocido Hotel Castella de Lloret, en el marco de un operativo conjunto. Se trata de un supuesto establecimiento turístico que, desde hacía meses, se había convertido en el protagonista de innumerables quejas vecinales.
El Hotel Castella, apodado por algunos como el Hotel de los Horrores, no solo era un punto de conflicto para los vecinos por los constantes ruidos y molestias, sino que, según las quejas y las averiguaciones de los agentes, en sus instalaciones se ejercía la prostitución clandestina y se vendían todo tipo de drogas. De hecho, la actuación del pasado mayo se saldó con la detención de dos ciudadanos albaneses, a quienes investigan como presuntos autores de un delito de narcotráfico y otro de trata con fines de explotación sexual.
"Los trabajadores dan miedo"
En este sentido, y según ha podido constatar Crónica Global, los huéspedes que se atrevieron a dejar reseñas en internet describían el lugar como "terrorífico" y señalaban a los trabajadores con aspecto de narcotraficantes. "Huele a marihuana por todos lados", "debería venir la policía y cerrar este antro", "los trabajadores dan miedo" o "la única diferencia con un hotel del Bronx es que no oí ningún disparo" son algunos de los comentarios que se pueden leer al respecto. Reseñas que constatan la nefasta reputación del establecimiento.
Así son las cosas, esta redacción ha podido comprobar que el establecimiento ha desaparecido de todas las aplicaciones de reserva de alojamiento turístico y el teléfono de recepción aparece "apagado o fuera de cobertura" en plena época estival. Lo que demuestra que, al menos, el local sigue cerrado temporalmente al público. Según fuentes municipales, el hotel ya estaría en manos de unos nuevos gerentes para iniciar una nueva etapa.
Narcotráfico y favorecimiento de la inmigración irregular
Según informa la Policía Nacional, durante el registro del pasado 15 de mayo no se pudo localizar a las mujeres que ejercían la prostitución, pero sí a dos ciudadanos albaneses que operaban como proxenetas y guardadores de la droga. Además, se encontraron herramientas para el pesado y envasado de sustancias estupefacientes, que se sospecha eran destinadas a la venta fuera de España.
Otro hallazgo preocupante fue la identificación de una gran cantidad de ciudadanos extranjeros solicitantes de asilo que se alojaban en el hotel, lo que añadió un nuevo frente a la investigación. Ahora, las pesquisas siguen abiertas para esclarecer el presunto delito de narcotráfico y favorecimiento de la inmigración irregular.
Nuevos frentes por resolver
La buena coordinación entre todos los cuerpos policiales que operan en Cataluña ha sido clave para que el operativo se llevara a cabo de forma exitosa, permitiendo clausurar un punto de conflicto social y vecinal en Lloret de Mar. La noticia del cierre ha sido recibida con alegría por los vecinos, quienes han expresado su alivio tras el fin de las actividades ilícitas que perturbaban la tranquilidad de la zona, a la espera de que la nueva etapa del establecimiento se encuadre en el marco de la legalidad.
El Hotel Castella, una vez un lugar para el descanso de turistas, se había convertido en un centro de actividades criminales. Ahora, tras la intervención policial, la esperanza de los residentes es que la clausura definitiva del Hotel de los Horrores dé paso a una nueva era. Por su parte, fuentes policiales insisten en que la investigación "justo acaba de empezar", ya que tras la inspección se abrieron nuevos frentes por resolver.
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