Crimen de Torroella: los mossos registran la casa de la pareja de la mujer asesinada a cuchilladas

Novedades en el macabro crimen de Torroella de Montgrí (Girona). Este martes, agentes de Mossos d'Esquadra han registrado a última hora el domicilio de H. D., de 39 años, vecino de Palafrugell (Girona) y principal sospechoso del asesinato a cuchilladas de su pareja, F. D., de 45 años y cuyo cadáver apareció en el interior de un coche el pasado domingo.

El registro se ha producido el mismo día en el que la policía ha detenido a H. D. por su presunta relación con el crimen. En concreto, el arresto ha tenido lugar a las 11.30 en Flaçà (Girona) a manos de los agentes de la División de Investigación Criminal (DIC), que se han hecho cargo del primer crimen machista del año en Cataluña.

Trabajaba en un bar

H. D. y F. D. se conocieron en Torroella de Montgrí años atrás, cuando ambos residían allí, aunque el presunto asesino vive hoy por hoy en Palafrugell. La víctima, en cambio, tenía domicilio en L'Estartit, donde compartía techo con su hijo de 17 años y más personas. Actualmente había comprado un piso en otra parte de la localidad.

F. D., separada de su marido hace cinco años, llegó a Torroella en 2014. Y, hasta hace unos meses, trabajó en un bar del paso de Catalunya, que cerró por reformas. En la actualidad estaba empleada en un bar de Verges (Girona).

Un coche averiado

A la espera de conocer la declaración del detenido, todo apunta a que la tarde del pasado sábado la pareja quedó para verse en la zona de la desembocadura del río Ter, una zona llena de campos y apenas transitada a esas horas en esta época del año.

Se da la circunstancia de que el coche de F. D. se había averiado, por lo que el mecánico le prestó uno que debía devolver antes de las siete de la tarde del sábado, pero no lo hizo, lo que levantó las primeras sospechas.

Geolocalizada

El domingo por la mañana, al ver que no había ido a casa y no podían contactar con ella, uno de sus hermanos, todos ellos residentes en la zona, la localizó con una aplicación con el teléfono móvil en la zona de la Gola del Ter y alertó a Mossos, pero fue él quien la encontró muerta en el asiento del conductor del vehículo que le habían prestado.

A renglón seguido, se activó todo el protocolo en caso de muertes violentas y la DIC comenzó la investigación. Enseguida todas las miradas se centraron en su pareja, pues es una persona celosa que había tenido varios episodios conflictivos, aunque no constaban denuncias previas.