La Consejería de Acción Climática de la Generalitat de Cataluña ha iniciado este lunes el dispositivo para retirar los peces del pantano de Riudecanyes (Tarragona) para intentar garantizar la calidad del agua para uso de boca y también evitar que los animales mueran.



La actuación se lleva a cabo con una embarcación de pesca marítima de tipo pelícano, donde se ha instalado el equipo de pesca eléctrico.

Una semana de trabajos

La previsión es que este dispositivo permanezca durante más de una semana y que la mayoría de peces pescados sean de especies exóticas.



"Cuantos más peces podamos retirar, más mejoraremos la calidad del agua", ha explicado el jefe de Pesca Continental de la conselleria, Sisco Mañas, que no ha cuantificado el objetivo de la operación.



Pese a su reducido tamaño, la actual situación del pantano tarraconense es una de las que más preocupa a la Generalitat: "Es el embalse con más necesidad de actuación. Corríamos el riesgo de que de un día para otro empeorase la situación de golpe", ha asegurado Mañas para justificar la medida.

"Uno de los niveles más bajos de la historia"

"Ridecanyes sólo se abastece de este pantano y está en uno de los niveles más bajos de la historia. La concentración de fango y de peces provoca que este agua cada vez sea más difícil de potabilizar", ha lamentado el alcalde del municipio, Ernest Roigé (ERC).



Aunque de momento no han tenido problemas con el agua de boca, Roigé se ha mostrado preocupado: "Ahora el agua nos sale clara, pero no sabemos cuánto tiempo podremos mantener este nivel de potabilización"



El embalse, que también abastece al pueblo de Duesaigües, es uno de los que más está sufriendo los efectos de la sequía, y está actualmente a sólo un 4% de su capacidad.

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