Los alumnos de infantil, primaria y secundaria vuelven a las aulas y no lo hacen en una situación distinta a la del año pasado. La consellera de Educación, Anna Simó, no ha conseguido frenar la huelga de profesores convocada para este miércoles por Ustec, Intersindical y CGT para reclamar mejores condiciones laborales y la reversión de los recortes.
Así, Cataluña empezará el curso escolar 2023-2024 como lo hizo hace justo un año, cuando todavía ostentaba el cargo el exconsejero Josep Gonzàlez-Cambray: con movilizaciones.
"Un sistema público de calidad"
Hoy es un día marcado en rojo en el calendario de las familias. Un total de 1,6 millones de estudiantes de infantil, primaria y secundaria vuelven al colegio después de las vacaciones de verano. Se trata de la cifra más baja desde 2006 debido a la bajada de la natalidad, que empieza ya a notarse en las primeras etapas educativas.
Sin embargo, el curso comienza con la convocatoria de una jornada de huelga por parte de los sindicatos Ustec, CGT e Intersindical para reclamar un "sistema educativo público catalán de calidad" tanto para los alumnos como para los profesionales ante las carencias que, a su parecer, tiene el sistema actual.
Simó promete revertir los recortes
Las organizaciones convocan el paro para mostrar su "disconformidad con las políticas de educación por la regresión en la recuperación de las condiciones laborales" previas a los recortes, e instan a aumentar la inversión en educación.
En este sentido, la consellera Simó ha reiterado que su objetivo es revertir los recortes en la educación pública y que lo hará "en función de lo que los escenarios presupuestarios permitan", en referencia a los Presupuestos de la Generalitat de 2024. "En este momento no tenemos los recursos", ha expresado hoy mismo en una entrevista en El Món a Rac1.
Servicios mínimos
Para la jornada, el Govern ha previsto que debe haber una persona del equipo directivo por cada centro --en las guarderías un miembro del claustro--, y un docente por cada tres aulas, y el 50% de las plantillas en educación especial y guarderías.
En el complejo educativo de Tarragona el 50% de personal de comedor y cocina, una persona de mantenimiento por turno y mantenimiento del servicio habitual en enfermería, vigilancia y el turno de noche de los tutores. Además, en el ocio educativo, tendrá que haber el 50% de monitores de comedor, de servicio de cocina, de acogida, de extraescolares y de atención al alumnado con necesidades educativas especiales en guarderías y centros de Infantil, Primaria ESO y educación especial.