El Ayuntamiento de Barcelona se ha lavado las manos ante la polémica del traslado de féretros en plena calle del Tanatorio de Sants, una operativa que provoca quejas de los vecinos y a la que se ha sumado la organización de consumidores Facua. Los responsables del distrito han comunicado que "no hay ninguna normativa" que fije cómo mover las cajas fúnebres por la ciudad, por lo que aseguran que no tienen elementos para frenar la nueva realidad del barrio.
Los vecinos han mostrado un nuevo malestar con la respuesta que han obtenido de la Administración local y piden que el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni (PSC), intervenga en el conflicto.
Reunión del sector y la plataforma
Sí es consciente de que se trata del principal problema del barrio. De forma oficial, no han contestado a los requerimientos informativos sobre los ataúdes, por ahora vacíos, que los operarios de la Funeraria San Ricardo trasladan a pulso desde el aparcamiento donde dejan los coches fúnebres hasta la sala de velas.
Los vecinos hallaron su respuesta en una reunión informativa del sector con la plataforma en la que estaba el Distrito de Sants. Fue la semana pasada y participaron en ella los representantes del Ayuntamiento de Barcelona, los operadores y los vecinos. En el encuentro, el gobierno de barrio admitió que "no hay ninguna norma que expresamente y de forma detallada indique cómo y dónde se deben hacer las operaciones con féretro".
Apela a la "profesionalidad"
Así lo indica el acta de la reunión, a la que ha accedido este medio. En el cónclave, los representantes municipales señalaron que no sancionarán a Funeraria San Ricardo, los gestores del nuevo equipamiento situado en medio de la trama urbana.
Eso sí, apelaron a "razones de profesionalidad, seguridad, estética, discreción y diligencia", así como de "requerimiento de licencia de actividad" para que el "movimiento" y "manipulación" de los féretros se haga "dentro" del equipamiento.
Los vecinos piden a Collboni que intervenga
Estas explicaciones no convencen a los vecinos. En conversación con este medio, un portavoz de la Plataforma Stop Tanatori ha lamentado que "tengan que aguantar el ir y venir de féretros frente a sus casas, ante un parque infantil y en un camino escolar".
Ante ello, desde la agrupación de residentes piden al nuevo alcalde de la capital catalana, Jaume Collboni (PSC), que "intervenga" en el conflicto con San Ricardo. Y le lanzan una advertencia. Si no lo hace, "se encontrarán con él" en las Fiestas de Sants.
Sin respuesta respecto al uso
Desde Stop Tanatori lamentan que la reunión de la pasada semana, en la que se presentaba el nuevo plan de ordenación del sector en Barcelona, "no resolviera si los tanatorios deben operar o no en una nave de uso exclusivo".
Ese punto es crucial, porque la ordenanza de servicios funerarios actual lo deja en el aire y, a la vez, permite la operativa de equipamientos como el de Sants. Los vecinos piden endurecer la norma, pero hasta ahora el gobierno municipal no ha recogido el guante.
Cabe recordar que el principal problema es que la nave en la que se ubica el tanatorio no cuenta con el espacio necesario para ubicar un almacén para cajas y urnas vacías, una realidad a la que se suma que los coches fúnebres no pueden acceder hasta la puerta del equipamiento por la realidad de las calles de Sants. Las nuevas salas de velas de Barcelona están ubicadas en una calle estrecha, por lo que el último tramo del desplazamiento de los ataúdes se realiza a pie por parte de los operarios de la compañía.
Crisis de reputación y se queja hasta Facua
El vaivén de ataúdes en la calle en Barcelona ha dado la vuelta en medios de comunicación de toda España como fenómeno inaudito. La asociación de defensa del consumidor Facua también criticó la operativa y pidió el traslado de la nueva sala funeraria a un lugar más idóneo.
No es algo nuevo, pues los contrarios ya llevaban tiempo avisando de que los coches fúnebres no cabrían en el Tanatorio de Sants. Advirtieron en 2021 de que la calle Puiggarí, la de entrada de servicios, sería demasiado estrecha para los vehículos de transporte de cajas. La plataforma entiende que esto vulnera la normativa metropolitana. Por ahora, el tanatorio está pendiente de la licencia de actividad para empezar a operar.