Los Mossos d'Esquadra cercan un posible grave caso de violencia doméstica por parte de un okupa residente en El Masnou (Barcelona) que ha conmocionado a la población. La policía catalana se ha activado tras divulgarse un vídeo en el que se ve al hombre propiciando una paliza muy violenta a su hija. Según fuentes locales, los hechos tuvieron lugar la semana pasada delante del piso allanado.
Fuentes del cuerpo autonómico explican a Crónica Global que los agentes están en alerta y trabajando para detener al protagonista del vídeo. La agresión sería el corolario de una pelea que se habría iniciado en el piso okupado y que culminó en la puerta del inmueble, situado en la calle Sant Josep del municipio. La agresión demuestra un nivel de violencia muy elevado contra la chica, que sería mayor de edad.
Falta de colaboración de la familia
Agentes de Mossos d'Esquadra y la policía local de El Masnou se personaron en el inmueble allanado el jueves pasado por la noche. Alguien había dado la alerta de una pelea. No obstante, al llegar allí no se pudo acreditar la agresión por falta de colaboración de la familia.
El escenario cambió horas después. La difusión del vídeo que muestra la lluvia de golpes que le propinó el padre a su hija en plena calle acreditaría el relato de las denuncias a los cuerpos de seguridad. En el mismo documento, se ve cómo la joven se intenta defender de su agresor y le insulta. Entre otras cuestiones, le acusa de ser un "pederasta".
Ayuntamiento: "Conflictos familiares"
Ante las nuevas evidencias del posible caso de violencia doméstica, incluida una denuncia interpuesta en una comisaría de Barcelona, los Mossos han avanzado en la investigación y el hombre se juega una detención por un delito flagrante.
El Ayuntamiento de El Masnou, gobernado desde 2015 por una coalición de ERC y PSC, también conoce el caso. Los portavoces municipales explican que "tienen constancia de la okupación" del inmueble y detallan que "los cuerpos y fuerzas de seguridad y servicios sociales han intervenido [en el piso] en diversas ocasiones por conflictos en el ámbito familiar".
Propietario: "El nivel de violencia lo dice todo"
El propietario del domicilio relata que lleva "años tratando de recuperar la propiedad". Se trata de un profesional inmobiliario que recuerda que el okupa "tiene una denuncia contraria, pero es imposible echarle" y manifiesta que los vecinos también han recurrido a la justicia por los constantes problemas de convivencia con él. "Hay denuncias por gritos y por un posible caso de maltrato animal", añade.
El inversor subraya que él "no es un gran tenedor, sino que la vivienda está adscrita a una empresa con tan sólo dos pisos" en propiedad. Antes de la okupación, habitaba en ese piso una "señora que pagaba religiosamente la renta mensual, pero se colaron familiares de la antigua inquilina y sus amigos. Y llevan años sin pagar el alquiler".
Cataluña: cuatro de cada diez okupaciones
El caso de El Masnou llega después de que el Ministerio del Interior publicara en abril los datos de criminalidad del primer trimestre. Como explicó este medio, Cataluña presentaba 1.673 casos de tomas de pisos a la fuerza, una cifra que supera de lejos los de la segunda autonomía con más allanamientos. Se trata de Andalucía, con 594.
Por su parte, el Instituto Coordenadas ha estimado que el fenómeno de la okupación ha aumentado en el territorio del orden del 77% en los último años. El centro de estudios alerta también de los nuevos perfiles de denunciados, como los inquilinos que rechazan pagar el alquiler, los denominados inquiokupas porque sí tienen un contrato de alquiler con la propiedad. Es el caso del individuo de El Masnou que se investiga por la violencia que ejerce contra su familia.