Algunas personas van en busca de relax bajo el sol. Otras, a practicar deporte o a disfrutar de un día en familia. Sí, las playas son destinos que atraen a bañistas de todas las edades.
Sin embargo, es importante recordar que, aunque pueden ser lugares de diversión y alegría, también presentan ciertos peligros que hay que tomar en cuenta para una experiencia segura.
Un verano negro en Cataluña
Ante la creciente preocupación por la seguridad en las playas, con un goteo constante de personas fallecidas por ahogamientos. Este verano, las playas catalanas han registrado hasta trece personas fallecidas en solo un mes. Así, los expertos dan una serie de consejos clave que pueden marcar la diferencia entre un día de playa placentero y uno lleno de sustos y accidentes.
Desde Protección Civil afiman que existen dos escenarios habituales: las personas ahogadas con el mar calmado y bandera verde, que suelen ser personas mayores que sufren algún mareo o descompensación dentro del agua, y las que perecen ahogadas con bandera amarilla o roja, a causa de las corrientes marinas y las olas, que entran en escena.
No subestimar el poder del mar
Un mar en calma puede llegar a dar una falsa apariencia de seguridad, pero nada está más lejos de la realidad. Así, los expertos insisten en que es imprescindible controlar a los más pequeños en todo momento, y tener en cuenta que el peligro puede aparecer en cualquier momento.
Por otra parte, hay que "evitar exponerse al riesgo cuando se salta al agua a rescatar a alguien porque si no en vez de tener un ahogado, tendremos dos", advierte Xavi Rico, jefe territorial del Servicio de Emergencias Médicas (SEM). Rico recomienda inicialmente "mantener la calma" y dar "directrices" a la persona que está en el agua para que gane estabilidad, como ponerse cara arriba y nadar hacia atrás con los pies. "Y si le asistimos en el agua, tenemos que abordarlo por detrás y cogerlo por debajo de las axilas para arrastrarlo hacia afuera".
Entre los principales consejos, sin embargo, se encuentra la importancia de no subestimar el poder del mar y sus corrientes, que pueden ser extremadamente peligrosas y arrastrarnos hacia zonas de profundidad sin que nos demos cuenta.
Respetar las banderas
Estas banderas son una manera de indicar cuáles son las zonas seguras para el baño y cuáles presentan mayores riesgos. Otro aspecto crucial a tener en cuenta es la atención que debemos prestar a los niños mientras disfrutan de la playa.
Los pequeños pueden distraerse fácilmente mientras juegan y alejarse de sus padres, por lo que es importante estar pendientes de ellos y asegurarnos de que no se acerquen demasiado al agua. Además, es fundamental prestar atención a las señales de peligro que indican zonas profundas, así como estar alerta ante posibles peligros en la playa, como rocas afiladas o fuertes vientos.
En compañía
Oriol Canals, socorrista y director de Pro-Activa, una reconocida organización dedicada a la seguridad y prevención en espacios acuáticos, ha dado en una entrevista en Rac1 algunas recomendaciones adicionales, como la importancia de ir en compañía, ya que puede ser crucial en caso de cualquier emergencia.
Además, Canals recalca la importancia de mantenerse hidratado, especialmente durante los días de intenso calor, así como de utilizar protector solar para proteger nuestra piel de los dañinos rayos UV. Sin embargo, a pesar de todos estos consejos, lamentablemente aún existen personas que corren el riesgo de ser víctimas de accidentes en las playas.
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