Pelotazo en la prostitución de Barcelona pese a la 'ley del solo sí es sí'

Pelotazo en la prostitución de Barcelona tras la aprobación de la ley de garantía de la integridad sexual, conocida como ley del solo sí es sí, y en pleno debate sobre regular o prohibir el sexo de pago en España. El meublé más antiguo de la Ciudad Condal se vende por la friolera de 12 millones de euros cuando arrecia la polémica sobre si el trabajo sexual es trabajo y, si lo es, cómo regularlo. Es un asunto tan caliente que ayer se debatió en el pleno municipal de la capital catalana, con acusaciones entre partidos. 

Lo indican fuentes del sector del ocio nocturno, que apuntan a la colocación en el mercado de Top Damas, uno de los lupanares "míticos", según sus dueños, de la segunda mayor ciudad española. El Damas, situado en el elegante barrio de Sant Gervasi, en una acomodada zona por encima de la avenida Diagonal, busca nuevo propietario por un precio que rivaliza con algunos de los hoteles convencionales en venta en Barcelona. 

La clave: la licencia

Desde el intermediario que vende el lupanar se destaca que el local cuenta con una "licencia de actividad única en Barcelona". Se trata, en efecto, de un permiso municipal que le autoriza a operar 11 discretas suites temáticas --el 75% de un anodino edificio residencial-- como lugar de citas encubierto, con lavandería industrial, recepción, dos entradas, una de ellas discreta, y un piso auxiliar entero de 80 metros cuadrados. 

Es, dicen los que buscan colocarlo, la "casa de citas más conocida" de la Ciudad Condal y "una de las más célebres" de Europa. Se entrega llave en mano y "funcionando al 100%". 

"Somos un hotel"

A preguntas de este medio, la madame del club ha confirmado la venta del establecimiento "por jubilación", y ha recordado que "tienen mucha historia, hasta 23 años funcionando ininterrumpidamente". Eso sí, "no son un prostíbulo, son un hotel que alquila habitaciones a quien quiera. Lo que pasa dentro, no es problema nuestro". Preguntada por más detalles, ha preferido acogerse a la necesaria "discreción". 

Otras fuentes del sector sí han dado más datos, asegurando que 12 millones de euros por un meublé de 11 habitaciones "es un precio justo si te tiene en cuenta que es de propiedad, no es un traspaso". Desde la noche de Barcelona recuerdan la "elevada facturación" que pueden tener estos negocios. 

"A partir del viernes a las 15 horas es fiesta"

Facturen o no, los vecinos del lugar confirman que hay ingresos. "A partir del viernes sobre las 15:00 horas se ve un ir y venir de caballeros constante. Es una fiesta", explican sobre un centro de rehabilitación cercano situado en la misma calle. Desde el negocio destacan que "jamás causó ningún problema, eso sí, aunque ya nos gustaría a nosotros llegar a valer 12 millones de euros". 

Gloria tiene a su hijo viviendo delante del Top Damas y lo confirma. "Todo el mundo lo sabe y a veces se hacen bromas, pero nunca jamás causaron ningún problema", asegura. Guillermo, que vive en la esquina de Sant Eusebi con calle Alfons XII, opina que "pasan muy desapercibidos, con la excepción del fin de semana, pero la calle Sant Eusebi se conoce como la del burdel en toda Barcelona. Somos famosos". 

Debate caldeado hasta en el pleno

La salida al mercado del love hotel llega en pleno debate político sobre cómo abordar el sexo de pago. La diferencia de opiniones es tal que el asunto se debatió ayer de nuevo en el pleno municipal de Barcelona, con división entre socios de gobierno. El PSC, aliado de Ada Colau (BComú), planteó que Barcelona se declarara ciudad abolicionista de la prostitución; prohibir los locales de alterne --como el Top Damas-- y sumarse a la Red de Ciudades contra la Trata. 

La proposición del grupo de Jaume Collboni fue rechazada. La tumbaron los votos de BComú, ERC y Ciudadanos. La apoyaron el propio PSC, Junts, Valents, PP y la concejal no adscrita. 

Debate durante y después del 'sí es sí'

El duro intercambio de ideas sobre este asunto ha penetrado hasta el seno del Consejo de Ministros. El PSOE es una fuerza abolicionista y Unidas Podemos, regulacionista. Esta diferencia se puso de relieve durante el debate y tramitación de la ley del solo sí es sí. Los borradores contenían prohibiciones más duras del trabajo sexual, incluida la tercería locativa, que es la actividad que precisamente hace el Top Damas de Barcelona: alquila habitaciones para el intercambio sexual por dinero. 

Finalmente, a ley de garantía de la integridad sexual condenó la prostitución de forma simbólica: en el preámbulo, donde considera que hacer negocio con ella constituye "violencia sexual". En cambio, el texto sí ilegalizó la publicidad sobre servicios sexuales. 

Prohibir o regular

En conversación con este medio, Núria González, abogada, activista feminista y miembro de Catalunya Abolicionista (Catab), ha afeado que "Barcelona sea la capital de la prostitución del sur de Europa". González ha reclamado "políticas más consistentes para evitar que se explote sexualmente a la mujer" y ha afeado que la Ciudad Condal tenga "una oferta turística de sol, playa y bajo coste en el que las putas también estén incluidas". La letrada ha criticado que la ley del solo sí es sí "lo fíe todo al consenso", cuando según ella, "en muchos casos en la prostitución no hay consenso real, porque se ejerce presión económica". 

Por contra, los regulacionistas se están agrupando en torno a la plataforma Stop Abolición, que busca defender el derecho de la mujer a ejercer el trabajo sexual. Desde esta agrupación aseguran de que la ilegalización desprotege a las mujeres y se las condena a la "clandestinidad", provocando un aumento de violencia, acoso y agresiones.