Imagen de un burdel de Barcelona / CG

Imagen de un burdel de Barcelona / CG

Vida

Un empresario desafía a Colau y abrirá el mayor burdel de Barcelona

El directivo volverá a poner en marcha un club de 'striptease' de 700 metros cuadrados en un local precintado por el ayuntamiento

29 agosto, 2018 00:00

Desafío a Ada Colau. Un empresario abrirá el mayor club de alterne de Barcelona. El directivo ha llegado a un acuerdo con la propiedad y está reformando el local de 700 metros cuadrados que precintó el Ayuntamiento de la Ciudad Condal en marzo.

Según ha podido saber este medio, el ejecutivo, que dirige el club Skylab Barcelona y el antiguo Pink Lady, ha tomado las riendas del espacio, cuya propiedad es de tres personas procedentes del sector del transporte de la capital catalana. Está en plena reforma y se prevé su reapertura en otoño. Cuando se estrene, el lupanar situado en la avenida de Sarrià será el mayor burdel de Barcelona, superando a icónicos espacios para el público mayor de 18 años como Bacarrá.

Contactado por este medio, el profesional ha preferido no dar más datos sobre la iniciativa empresarial.

"Competencia sana"

Otras fuentes del sector del ocio para adultos, no obstante, han indicado que el local "será competencia sana" para el strip club propiedad del histórico empresario Jaime Veiga, que también opera el bar Pippermint, situado en la calle Borí i Fontestà de la capital catalana, amén de para otros que se ubican en la zona alta de Barcelona.

"Se sumará a una serie de locales eróticos de nivel, dirigidos por españoles. Trabajan de forma similar y responderán al mismo tipo de demanda. Hará daño seguro a los que ya existen", han agregado las mismas voces.

Barrera municipal...

Pese a la relativa buena acogida que le ha dado el sector del sexo de pago a este nuevo rival, lo cierto es que no lo tendrá fácil para sortear el cerrojo del Ayuntamiento de Barcelona, que comanda Ada Colau (Barcelona en Comú). El distrito de Les Corts cerró en marzo de 2018 el anterior establecimiento por abuso de licencia, ya que los técnicos consideraban que allí se producían espectáculos de naturaleza sexual. "No es la primera vez que se precinta por este motivo", justificó en aquel momento el equipo de gobierno.

La bajada forzosa de persiana por infracción administrativa, decretado para tres meses, generó una batalla legal, precedida de diversos encontronazos entre los grandes del ocio para adultos en Barcelona, que atentaron contra el espacio, llamado entonces Dollhouse Barcelona.

...y oposición del anterior arrendatario

Hay más. La nueva aparición en el sector del sexo de pago de Barcelona tendrá que rebasar otro obstáculo. El anterior gerente del club de destape busca recuperar su negocio, ya que mantiene una batalla legal abierta para hacer valer el contrato de arrendamiento del espacio y la titularidad de los bienes que, asegura, los propietarios le arrebataron cuando aprovecharon el precinto del local para cambiar la cerradura y hacerse físicamente con el espacio.

"El nuevo macroclub lo comanda un hombre de paja de la propiedad para hacer el máximo negocio y, después, irse. O operar todo lo que pueda hasta que el distrito se fije en él. El exdirector está convencido de que recuperará el local de striptease, pues obra en su poder un contrato de subarrendamiento. Si vence dicho acuerdo, los bajos pasarían a ser propiedad del hotel Meliá Sarrià, a quien la sociedad en disputa arrendó el local", han indicado fuentes cercanas al empresario.

Sean cuales fueran las disputas, el tiempo dirá si este nuevo añadido a la oferta para adultos de Barcelona logra hacerse un hueco entre las históricas casas de lenocinio de Barcelona, que han sufrido el impacto de la inestabilidad en Cataluña desde el referéndum ilícito de independencia del 1 de octubre de 2017 en forma de caída de clientes.