El gurú de Argimon sostiene su clínica privada con recursos públicos
Joan Vegué, nuevo hombre fuerte de Salut, dirige un centro médico con ánimo de lucro que utiliza dinero y horas de médicos pagados por el CatSalut
23 mayo, 2022 00:00El nuevo máximo asesor en salud mental del consejero catalán de Salud, Josep Maria Argimon, sostiene la clínica privada en la que es vicepresidente con recursos públicos. El doctor Joan Vegué, nuevo coordinador del Plan Director de Salud Mental de Cataluña, es vicepresidente de TLP Barcelona, una empresa privada que se apoya en un alquiler pagado por CPB, sostenida por el CatSalut, y por médicos que hacen horas en horario público.
Alertan de ello fuentes del sector y lo corroboran directivos de la industria. TLP, de Vegué, opera desde el entresuelo segunda del número 296 de la calle Diputació de Barcelona. Este inmueble es propiedad de Probosch SL, la inmobiliaria de Rosa Verdaguer, directora general de Centre de Psicoterapia Barcelona (CPB) SSM, proveedor de salud mental del Servicio Catalán de Salud (CatSalut).
"Recursos públicos"
La situación es mucho más que una mera spin off privada. TLP es una empresa privada --"los pacientes pagan allí mismo al contado", destacan fuentes conocediras-- que está sostenida por CPB y, en última instancia, por el concierto público del CatSalut. "Es el caso de una empresa privada que se apoya en dinero público, lo que genera dudas, cuanto menos", señalan las voces implicadas.
¿A qué se refieren con apoyarse en dinero público? "Uno, el alquiler del edificio de la clínica lo paga CPB a Probosch. Dos, los turnos de los sanitarios que visitan allí se complementan con su horario público. Pasan consulta privada en horario público sin pudor alguno, desde hace años y como si fuera algo normalizado en lugar de un fraude de dinero público. De hecho, desde CPB lo ofrecen para complementar las horas", argumentan. Todo ello ha sido expuesto a TLP, pero la clínica no ha contestado.
"Que expliquen si reciben pacientes"
Este hecho sería justificable si TLP Barcelona recibiera pacientes derivados de CPB, el circuito público (por bien que concertado). Pero no es así. La clínica privada que tiene al doctor Joan Vegué como vicepresidente solo recibe a enfermos que abonan la visita o los menos graves, indican voces del sector. "Que detallen cuál es el circuito para derivar pacientes diagnosticados a TLP a este recurso", plantean directivos del sector.
"Si es supuestamente público, ¿cómo es que en los centros de salud mental u hospitales de día nunca se tiene en cuenta ese recurso para tratar a pacientes tan difíciles y graves? O es que solo van los elegidos que deciden ellos? Que explique Rosa Verdaguer el circuito de derivación", apremian las mismas voces.
CPB: "Otros proveedores también lo hacen"
Rosa Verdaguer, directora general de CPB, ha confirmado que TLP es un brazo privado del proveedor público, aunque ha aportado otra versión de las críticas. Sostiene la directiva que "Grup TLP no es una empresa, sino otra alianza estratégica con otros proveedores del CatSalut", detalla. El objetivo es "la mejora del conocimiento, la investigación, la formación y la docencia", ha agregado Verdaguer.
Es desde TLP, ha añadido la directiva, "desde donde también se dirige todo el programa transversal de TLP en todos los dispositivos de CPB". Por ello, la alto cargo sostiene que "la actividad que se hace forma parte de CPB SSM, y pese a que hay una pequeña parte de actividad privada, son ingresos directos de CPB SSM". Este escenario es natural porque lo hacen "otras muchas entidades del Siscat --la red concertada--, que tienen actividad privada".
La Sindicatura se lo afeó al Clínic
Desde otros círculos no se está de acuerdo. Recuerdan que es "inaudito" que se pague el alquiler del piso a la gerente y que al menos "dos altos facultativos, probablemente más, trabajen en TLP cuando deberían estar atendiendo en lo público". ¿Cuáles? "Núria Ribas, psiquiatra y jefa de servicio del Hospital de Día de CPB, y María Jesús Rufat, psicóloga clínica". Hay, según estas fuentes, "otro, pero estas dos doctoras seguro, y es algo normalizado por Andreu Codina, gerente, pese a que es un posible fraude del concierto público". ¿Qué dice el CatSalut de ello? A preguntas de Crónica Global nada, pues no ha contestado.
Sea como fuere, lo cierto es que estas alegaciones no son nuevas en el sistema sanitario concertado. La Sindicatura de Comptes afeó un hecho similar al Hospital Clínic Barcelona en 2017. Ciudad sanitaria que, como CPB, es concertada. En su informe de 2016, el fiscalizador reprochó que parte de las operaciones (un 7%) de la parte privada del Clínic, Barnaclínic, se hiciera "en horario público". Es lo mismo que ocurre con CPB y TLP, que dirige el doctor Vegué, aunque en este caso en el campo de la salud mental y no en la atención hospitalaria.