El exobispo de Solsona Xavier Novell y Silvia Caballol, padres de dos niñas

El exobispo de Solsona Xavier Novell y su pareja, Silvia Caballol, han sido padres de dos niñas gemelas, Coaner y Míriam.

La noticia, no por esperada es menos sorprendente. Poco después de que su relación saliera a la luz y de que se hablara de una posible boda entre ambos, se supo que ella estaba embarazada. Un factor que añadía más leña a un escándalo eclesiástico.

Historia de amor

El religioso dejó el báculo a finales de agosto por amor con el permiso de El Vaticano. La Santa Sede le pidió que guardara silencio y él lo respeta, pero sus movimientos no dejan de ser noticia.

El obispo emérito de Solsona, Xavier Novell / EFE

La pareja se conoció en el obispado de Solsona. La escritora de novelas eróticas, tras su divorcio y posterior regreso de Marruecos, estaba sin trabajo. Vivía en Súria con su madre, quien fue a pedir empleo al capellán del municipio. Este religioso le informó de que Novell buscaba a una chica para que le ayudara con sus tareas diarias de la congregación. Allí surgió el amor entre ambos. 

Vida civil

El resto es de sobras conocido. Él le ayudó a tramitar su separación y, por si cabe la posibilidad de una boda por la Iglesia, la confirmó en junio. Estos trámites han tenido lugar fuera de Solsona y ha llevado mucho esfuerzo conseguir completarlos, tal y como indican fuentes próximas a la pareja. 

La escritora Silvia Caballol / FB

Tras notificar al Vaticano su renuncia eclesiástica y concedérsela, la relación salió a laluz. Él se fue a vivir a Manresa con ella, consiguió trabajo en el grupo Semen Cardona y trató de hacer vida civil en la medida que pudo. Aun así, no ha sido fácil estar fuera de los focos. 

Boda

Durante meses, las cámaras estaban a la puerta de su casa esperando captar una de las instantáneas más perseguidas: ambos juntos. En ese momento se conoció que ambos preparaban una boda por lo civil. El embarazo de Caballol precipitó que diesen ese paso.

Incluso su matrimonio civil tuvo algo de extraordinario. No solo por el hecho de que un miembro de la Iglesia se casara con una mujer divorciada con dos hijos que escribe libros con contenido erótico-satánico, sino porque el enlace se celebró fuera del horario habitual para intentar esquivar a la prensa. Cuestión que, finalmente, no se consiguió. Ahora, la pareja ha recibido a sus dos hijas.