Xavier Novell y Silvia Caballol ya preparan su boda

Nuevo vuelco en el caso de la dimisión de Xavier Novell. El obispo de Solsona prepara todo para casarse con su novia,ca Silvia Caballol, por la que dejó el hábito.

El religioso y la escritora de novelas eróticas quieren sellar su amor y ya han solicitado todos los papeles necesarios para celebrar una boda civil, según informa El Mundo.

Solicitud registrada

La pareja ha acudido este 7 de octubre a Súria, municipio de donde es ella, para presentar ante el Registro Civil toda la documentación necesaria para poder contraer matrimonio.

Tal y como indica el artículo 246 del Reglamento del Registro Civil, el juez abre un plazo de 15 días para que aquel que conozca "algún impedimento legal" para que se celebre el enlace "lo manifiesten por escrito o de palabra a este juzgado".

Movimientos previos

La noticia salta una semana después de que se conociera que, antes de dejar el báculo, el catalán movió los hilos para poder confirmar a su chica. Primero, lo intentó por las iglesias de la comarca de Segarra y finalmente acudió a un viejo conocido de la pareja.

Los novios acudieron, una vez más, a las raíces de Caballol y solicitaron al exrector de Súria, Fermí Manteca, que le dejara confirmar su novia. Así fue, la catalana recibió el sacramento el pasado 27 de junio de manos de su novio en la iglesia de Biosca (Lleida), de donde Manteca es ahora rector.

Relación estable

La noticia pone de relieve que la relación es cada vez más estable. Pese a que la relación de la pareja se conociera a principios de septiembre, en realidad, se remonta a mucho tiempo atrás. Lo saben los vecinos de Súria que antes de que estallara todo, ya vieron a los novios pasearse por las calles de la localidad. 

“Lo vieron en casa de ella cuando vivía con su madre”, señala una vecina. En alguna ocasión, Novell fue de visita y empezaron a correr rumores. El obispo aún no había renunciado.

Primer encuentro

La historia de amor, por eso, viene de antes. La mujer, de 38 años, se convirtió al Islam en su anterior matrimonio, pero acabó mal y acabó en divorcio. Al regresar a casa de Marruecos, donde vivía con su esposo y sus tres hijos, no tenía trabajo y se alojó en casa de su progenitora, una mujer muy querida en el barrio y muy creyente.

Su progenitora, devota, acudió como suele a misa y un día le preguntó al cura de la iglesia si conocía algún trabajo para su hija. Como si se tratara de una señal, fue así. El religioso le comunicó que el polémico obispo de Solsona, defensor de las llamadas "terapias de conversión" de las personas LGTBI y también de los políticos independentistas, necesitaba a una persona para que le ayudara en la diócesis. Allí se conocieron y surgió el amor.

Escándalo y silencio

La historia posterior ya se conoce. El 23 de agosto, El Vaticano hizo oficial la renuncia de Novell como obispo de Solsona. Pocos se esperaban que dos semanas después saliera a la luz el romance con la escritora, sólo la gente de Súria sabía de forma previa de uno de los romances del año. 

El cura exorcista abandonó la diocésis de Solsona y generó un alud de polémicas y comentarios que han puesto en el punto de mira a la Iglesia. La Conferencia Episcopal pide discreción y respeto para no convertir la situación en una “novela, pero las noticias que se van conociendo no dejan de dejar estupefactos a los creyentes...y al resto de la ciudadanía. 

Mudanza y búsqueda de empleo

Novell, por órdenes de la Santa Sede, guarda silencio sobre su relación. Abandonó su cargo de manera discreta y ha aparecido lo mínimo en público desde ese momento. Se ha mudado a un piso de 30 metros cuadrados en Manresa, en un edificio colindante con una iglesia y en la misma ciudad donde vive su chica. Los vecinos del lugar son conocedores de la situación. Hartos de la prensa esperan que la marabunta informativa pase para que el barrio recupere la normalidad y deje de haber periodista merodeando por el lugar a la caza de la imagen más buscada: Novell y Caballol, juntos. Por el momento, sólo se los ha visto así en la foto de la confirmación.

El obispo emérito renunció a su jubilación en el cargo que ofrece la Iglesia católica, pero está en duda si ha dejado la institución. Por el momento, más allá de querer casarse, está en búsqueda activa de trabajo. Su intención es recuperar su carrera como ingeniero agrónomo y ya ha tenido una entrevista con la empresa UPB Genetic World de Navàs. No ha sido seleccionado para el cargo, pero no desiste.