Un 10% de los funerarios, noqueados por el Covid

Uno de cada diez funerarios catalanes están de baja médica por Covid. Son los datos de incidencia del virus que revela la patronal de empresas funerarias Asfuncat. La organización empresarial reclama vacunar a 1.200 trabajadores del sector, como ocurrirá en la Comunidad de Madrid, y reivindica que son personal escencial en la gestión de la pandemia. 

En una nota pública, la parte empresiarial revela que "las bajas provocadas por coronavirus ya superan el 10% de los trabajadores del sector". Ello provoca un "riesgo de cierre" de operadores de la industria. Al ser un servicio esencial, como fija la ley 2/97, las incapacidades provocan un posible escenario de "bloqueo" de un sector crítico en la lucha por la pandemia. 

"Vacunen a 1.200 trabajadores"

Es por ello que Asfuncat llama al Govern a vacunar a 1.200 trabajadores de servicios funerarios. Personal que "pone en riesgo su salud diariamente". Poco más de 1.000 dosis de los preparados contra el Covid-19, infección que provoca el virus SARS-CoV-2, bastarán, agrega la misma fuente. 

La medida no es nueva: la Comunidad de Madrid ya ha anunciado que la aplicará. La patronal recuerda que el gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso "ha incluido a este sector en su programa de vacunación". Pide que la Generalitat haga lo mismo. 

Silencio de Colau

Precisamente, alcaldes de grandes ciudades españolas secundan la petición de inmunizar al personal de las empresas funerarias. Lo hizo ayer el primer edil de Granada, Luis Salvador (Ciudadanos), quien se comprometió a presionar a la Junta de Andalucía para que incluya a la plantilla de la empresa municipal de final del ciclo de vida, Emucesa, en el calendario de vacunación. 

Esta postura proactiva por la inmunización de los funerarios contrasta con el silencio del Ayuntamiento de Barcelona. Ni la alcaldesa Ada Colau ni el concejal Eloi Badia, responsable del área, se han reunido con la plantilla de Serveis Funeraris de Barcelona (Sfb), empresa mixta del ramo. Los trabajadores, pues, quedan al albur de lo que decida el Departamento catalán de Salud, que hasta ahora no se ha pronunciado.